El derbi de los históricos se salda con tablas

Barakaldo y Arenas se reparten los puntos en el primer encuentro de la temporada disputado en Lasesarre. Los dos conjuntos históricos de Bizkaia firmaron una primera parte muy tibia, sin prácticamente ninguna ocasión clara para romper el resultado inicial. Los de Aitor Larrazabal reaccionaron después del descanso, pero su ímpetu y acabar con dos jugadores más sobre el campo por la expulsión de Rementería y Celihueta, no les valió para lograr los tres puntos. De esta forma, los de la Margen Derecha acumulan cinco puntos en su casillero tras cuatro partidos disputados. Los fabriles suman su primer punto de la campaña, aunque con sabor agridulce por la posibilidad de sacar algo más beneficioso.

Desde el principio, se demostró que las fuerzas estaban muy igualadas y ninguno de los dos conjuntos lograba hacer daño a su rival. El Barakaldo lo intentaba con posesiones largas, pero le costaba mucho aproximarse al área contraria con peligro aparente. Mientras, el Arenas fue más ordenado en defensa y trataba de sorprender al contraataque con la velocidad vertiginosa de sus hombres de ataque. En este plano, destacó el desborde de Leandro, que se movía por todos los espacios, exigiendo un esfuerzo extra a la zaga fabril. Las ocasiones se podían contar a cuentagotas.

La primera opción real de estrenar el marcador la dispuso el cuadro arenero a los cinco minutos de juego, mediante una buena internada desde la izquierda de Jaume Pol, que finalizó con un disparo levemente desviado. Hasta el descanso, ambas escuadras mantuvieron un orden milimétrico y sus murallas defensivas parecían inexpugnables. Ninguna de los dos quería arriesgar en exceso. La siguiente buena oportunidad no llegó hasta el minuto 34 con un disparo de Leandro, que detuvo Rabanillo con mucha seguridad.

Justo al descanso, algunos aficionados se hicieron notar a pesar de jugarse el partido a puerta cerrada y alentaron a los locales con pirotecnia y cánticos desde fuera del estadio. Los fabriles puede que notaran el calor se los suyos y fueron mucho más verticales en la segunda mitad. De hecho, en el minuto 52, gozaron de su primera oportunidad para abrir la lata. El protagonista fue Obolskii, que realizó un disparo lejano que se fue a escasos centímetros por encima del larguero.

Sin embargo, no tardó en reaccionar el Arenas y solo cinco minutos después, Rementería dispuso de la ocasión más clara del encuentro hasta el momento al recibir un centro desde el costado derecho que remató casi desde el área pequeña. Su remate de cabeza no fue el idónea, ni mucho menos y el balón se perdió por saque de puerta. El segundo tiempo fue mucho más vivo que el primero. El Barakaldo dio un paso adelante y protagonizó varias acciones destacadas. Además, todo se pondría a su favor con la expulsión a Rementería en el minuto 76.

A partir de ese momento, el partido fue un monólogo del Barakaldo, que estuvo totalmente volcado en el área del Arenas. En estos últimos compases, Diego Carrio se convirtió en el héroe de los rojinegros con una parada salvadora a un remate de cabeza de Obolskii que algunos compañeros ya incluso celebraban. El guardameta gazteiztarra voló para mandar el testarazo a córner y rascar un punto para los suyos. Ya entrado el tiempo de descuento, los de la Margen Derecha se quedaron con nueve por la expulsión a Celihueta, que no tuvo mucho influencia en el devenir del choque.