Murias, a cumplir sus sueños en la Vuelta
Bizkarra, Barceló, Iturria, Rodríguez, Barthe, Samitier, Sáez y Bagües forman el ocho del equipo vasco para la ronda que arranca el sábado en Torrevieja
Oskar ORtiz de Guinea
Martes, 20 de agosto 2019, 00:31
Euskadi-Murias se zambullirá el sábado en la Vuelta a España, una carrera repleta de esos tiburones que acostumbran a buscarse la vida en las ... aguas del World Tour. No es fácil sobrevivir entre tanto depredador, pero el equipo vasco partirá mañana con «el sueño» de poder 'pescar' una etapa, como logró en su debut en la pasada edición a través de Óscar Rodríguez en la cima de La Camperona. «A ilusión no nos va a ganar nadie», aseguran los integrantes de la escuadra que desde el sábado correrá la Vuelta. La supervivencia comenzará a decidirse desde el primer día, una contrarreloj por equipos entre Salinas de Torrevieja y Torrevieja. Demasiados escualos a la vista. Así que la campaña de pesca se abrirá el domingo para la escuadra vasca, que durante veinte días vivirá con la caña preparada antes del cierre de la veda el 15 de septiembre.
Aritz Bagües, Mikel Bizkarra, Mikel Iturria, Óscar Rodríguez, Héctor Sáez -que repiten de 2018-, Fernando Barceló, Cyril Barthe y Sergio Samitier conforman el ocho que defenderá el maillot verde de Euskadi-Murias. «Un equipo bonito para pelear», aseguró Jon Odrizola, mánager de la formación, en la presentación que tuvo lugar ayer en el Aquarium de San Sebastián. En el acto no estuvieron Bagües, que estaba regresando de Noruega donde ha disputado la Artic Race (20º), y el manchego Sáez, por logística.
«Si vamos pensando que en Burgos luchamos con el Ineos, nos estrellaremos; pero no nos fijamos límite»
Jon Odriozola
Sin Aristi, ni Bravo, ni Sanz
Odriozola reconoce que ganar otra etapa ante tanta competencia es algo «casi imposible» pero factible «por la ilusión y calidad de estos chavales», a su juicio, «el mejor» ocho que han podido reunir para la aventura.
Bajo los tiburones del Aquarium posaron con sus bicicletas los ciclistas que competirán en la Vuelta. Pero en el ambiente flotaban algunas ausencias. En concreto, tres. En el caso de dos hombres rápidos como Enrique Sanz -que ha firmado cinco de las siete victorias del conjunto este año- y Mikel Aristi -ganador de una etapa en la reciente Volta a Portugal-, Odriozola explicó que «hemos estudiado mucho el recorrido y vemos muy pocas opciones de sprint».
Más llama la atención el caso de Gari Bravo, que no corrió Burgos y Artic Race para ultimar su puesta a punto para la Vuelta. El oñatiarra asume que «cuando decides un equipo, seguramente te equivocas. La Vuelta es más dura que otros años y llevamos un grupo compensado para hacerlo bien en esas etapas duras. Me gustaría llevar más corredores, pero solo podemos contar con ocho».
Bravo, por su parte, se mostró «apenado» por no poder quitarse la espina del año pasado, cuando llegó enfermo a la salida y bastante tuvo con acabar en Madrid. «El año pasado sufrí mucho y tenía ilusión por desquitarme. Ahora tengo un calendario alternativo con unas vueltas en Francia (Tour de Limousin y de Poitou-Charentes) y unas clásicas en Italia. Me siento bien y trataré de hacer un buen fin de campaña». Coincidirá, entre otros, con Aristi y Julen Irizar.
Es distinto el caso de Beñat Intxausti, fichado con la esperanza de recuperarlo para la Vuelta, pero el vizcaíno no termina de restablecerse y tuvo que abandonar en sus últimas carreras: Tour de Luxemburgo, Mont Ventoux Challenge, Route d'Occitanie, Ordizia, Getxo y Artic Race.
Odriozola puso énfasis en que un equipo como Euskadi-Murias, «sin casi recursos» ni financiación pública, sea capaz de ambicionar un triunfo parcial en una prueba como la Vuelta a España. El conjunto viene de hacer una magnífica Vuelta a Burgos, donde fue segundo tras el Ineos en la general colectiva y también en la individual con Óscar Rodríguez, sólo superado por Iván Sosa. «Si vamos a la Vuelta pensando en que en Burgos ganamos a Movistar y estuvimos cerca de Ineos, nos estrellaremos. Debemos tener los pies en el suelo, porque por presupuesto tendríamos bastante con acabar la carrera, pero dados los méritos y la capacidad de los corredores, no nos marcamos límites».
«La general, no»
La buena actuación del navarro Rodríguez en la ronda burgalesa no ha subido el listón de los sueños, después del éxito en La Camperona. «Los objetivos deben ir en función de la capacidad del equipo. Por ejemplo, si la Real Sociedad gana este año la Liga, no le puedes exigir que al siguiente gane la Champions. No podemos conformarnos con ser combativos y dar una buena imagen, pero aspirar a una general es un sueño. Trabajaremos etapa a etapa y veremos qué pasa. Hasta ahora nos ha salido todo bien, pero llegarán momentos difíciles y tenemos que estar preparados para hacer frente a estas situaciones», declaró.
El corredor de Burlada, por su parte, se descarta para luchar por la general. «Si para optar a una general en la Vuelta a Burgos ya se viven muchos momentos de tensión, imagina en una Vuelta a España. Me veo preparado para buscar etapas y prefiero desconectar los días que no son para mí y tratar de aprovechar aquellos que se adapten mejor a mis características».
Al igual que hace un año, Euskadi-Murias saldrá en la Vuelta sin poder confirmar su continuidad. «El año pasado supimos que seguiríamos en plena carrera -afirmó Odriozola-. Ojalá lo podamos hacer también esta vez. Estamos trabajando», declaró, en otras aguas y con otros tiburones.
«La etapa de Urdax puede ser una oportunidad»
Mikel Iturria (Urnieta, 1992) afrontará su segunda participación en la Vuelta a España. Se ha visto «cerca de los mejores» en carreras como Tour de los Alpes, Route d'Occitanie o Mont Ventoux Challenge, y se muestra «ilusionado».
- ¿Qué sensaciones tiene ante una carrera que ya conoce?
- Con la experiencia del año pasado, ya sé lo que nos vamos a encontrar. Este año el recorrido aún es más duro. Respecto al año pasado, evitamos el calor de los diez primeros días en Andalucía, que para nosotros es mejor. La intención es aprovechar todas las oportunidades que se nos presenten o ayudar al equipo a ese objetivo de conseguir una etapa.
- ¿Cómo se encuentra?
- Bien. En Burgos no tuve mucha suerte, como el día de Picón Blanco, que en los kilómetros previos al puerto se me salió la cadena en un bache, se me quedó enrollada y perdí tiempo. A partir de ahí, nos tocó ayudarle a Óscar (Rodríguez), que anduvo muy bien. Personalmente, llevaba tiempo sin correr y la vuelta me ha venido bien para coger ritmo. Creo que llego bien, pero las dudas las despejaremos a partir del sábado.
- Tendrá menos dudas que el año pasado, cuando debutaba en una grande...
- Ahora ya sabes por dónde puede ir la carrera, lo que te da más tranquilidad. Sabes dónde levantar el pie o cuándo apretar. Las carreras mantienen unas dinámicas, pero todos los años cambian las cosas y se pueden dar sorpresas.
- ¿Tiene alguna etapa marcada con una equis para intentarlo?
- Hace un par de meses estuve viendo el final de la etapa de Urdax. La víspera hay una contrarreloj, así que pienso que será una etapa propicia para las escapadas. Además es cerca de casa, así que puede ser una oportunidad bonita. Pero hay varias etapas para intentar moverse. Lo iremos viendo día a día. Por el recorrido, es una vuelta bonita para el equipo que llevamos. Cualquier día sería bonito, pero la de Urdax es especial por ser cerca de casa.
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