Así vivió 'Matxin' la épica victoria de Pogacar

Si ayer había alguien más contento que Tadej Pogacar, flamante ganador del Tour de Francia de forma sorpresiva, era su director en el UAE, el basauritarra Josean Fernández 'Matxin'. Ya lo llevaba avisando hacía semanas cuando todo el mundo era seducido por los logros de otro de esos jóvenes ciclistas llamados a revolucionar este deporte, Remco Evenepoel. Su desparpajo despertó numerosos elogios y hubo voces que le ensalzaban por encima de cualquier otro colega de profesión.

Sin embargo, 'Matxin' avisaba: «Ojo, que yo tengo a Pogacar». Y no se equivocaba. El esloveno, que solo tiene 21 años, acaba de hacerse con la Grande Boucle en la penúltima etapa (la última competitiva), una cronoescalada en la que ha dejado sentado a todos, rivales y público, cuando muchos daban por ganador al hasta entonces líder, su compatriota Primoz Roglic.

Pogacar ganó la contrarreloj y le arrebató el maillot amarillo a su amigo en los últimos kilómetros de la Planche des Belles Filles, una cima que cada vez que se completa en el Tour provoca un cambio de líder. Y esta vez no ha sido menos. La etapa, emocionantísima, mantuvo en vilo a todo el mundo y puso a prueba el corazón de todos.

El primero, el del director deportivo del UAE, un veterano, que ayer en meta estaba exultante. Horas después de los besos sin mascarilla en meta, el equipo colgaba un tuit con un vídeo (que pueden ver sobre estas líneas) en el que se puede ver la intensidad con la que todos siguieron la crono. Si 'Matxin' hubiera tenido pulsómetro, hubiera dado más pulsaciones que su pupilo, al que los petrodólares tienen amarrado hasta 2023.