Movistar seguirá en el World Tour tras su gran final de temporada
Finaliza en el puesto 12 de una clasificación de 20 equipos, donde pierden la categoría el Lotto y el Israel y ascienden Alpecin y Arkea
La agonía del Movistar para seguir la próxima temporada entre los equipos World Tour ha terminado de la mejor manera posible. Tras una primavera y verano para olvidar, la reacción del equipo telefónico ha sido brillante en el tramo final del curso. Un cambio de mentalidad que ha servido para ganar y acumular puestos de honor hasta tal punto de que Movistar ha finalizado en el puesto 12 de los 20 equipos que forman la máxima categoría internacional, cuando llegó a estar amenazado por el Lotto -equipo que ha perdido la categoría junto al Israel- en plena Vuelta a España, cuando la formación española ocupaba la 18º plaza.
Tras cerrarse las clasificaciones individuales y colectivas de 2022 de la UCI, Movistar se asegura el participar en las mejores competiciones entre 2023 y 2025, un logro que permitirá planificar y afrontar con tranquilidad y confianza el calendario y no con las apreturas y prisas que se han dado en este tramo final de la temporada, donde al menos se ha visto la capacidad de reacción de un equipo donde sus corredores han ofrecido su mejor versión.
Todo empezó con una reorganización del calendario en busca de puntos que ha tenido su recompensa. Además de la segunda plaza de Enric Mas en la Vuelta, Movistar buscó puntos en pruebas a las que antes no había dado importancia. Primero se fijó en Francia, donde Antonio Pedrero se llevó una etapa en el Tour del Ain, y en Limousin, donde Alex Aranburu peleó con éxito para llevarse la victoria final en esta ronda de cuatro etapas. Después llegó la victoria de Gonzalo Serrano en Gran Bretaña y su segunda plaza en Wallonie. Y quedaba lo mejor en Italia. Movistar programó la serie de clásicas finales con la despedida de Alejandro Valverde, Cortina y un Enric Mas totalmente recuperado tras la Vuelta. Y los resultados llegaron. Victoria en la Emilia, triunfo en la Copa Bernocchi, segundas plazas en la Copa Agostoni por parte de Valverde y de Mas en el Giro de Lombardía... Una racha de éxitos que traducida en puntos ha llevado a Movistar a escalar a la zona media de la tabla, un escenario inesperado tal y como estaba transcurriendo la campaña.
Para Patxi Vila, «ha costado dar con la tecla. Nos dimos cuenta de que había que cambiar cosas. Tenemos que dar las gracias a esos ciclistas que fueron a carreras con menos repercusión, pero que hicieron un gran papel. Los puestos conseguidos en ese calendario alternativo es lo que cambió la dinámica del equipo», explicó en el Marca el responsable de rendimiento de la formación. «Nos ha tocado adaptarse a lo que necesitaba la situación. El equipo ha hecho otro calendario históricamente, pero le dimos una vuelta por el tema de los puntos. Hemos dejado de correr vueltas y hemos apostado por más clásicas. Porque los puntos de la general de vueltas de 10 días, por ejemplo, son los mismos en muchas ocasiones que en clásicas 1.1. Ha tocado esto, pero es que creo que hay que dar una vuelta al sistema de puntos».
Y otro aspecto fundamental ha sido la implicación y el cambio de mentalidad de los corredores. Movistar hizo piña y muchos de sus integrantes sacaron su mejor versión para obtener las victorias y los puestos de honor que no se habían logrado en el resto de la temporada. Todo para evitar lo que ha sucedido con Lotto e Israel, formaciones con corredores muy importantes pero que no han estado al nivel que requería la situación. En el caso de los belgas, su buena campaña pese a todo, donde han logrado 25 victorias, les asegura invitaciones para la gran mayoría de las citas World Tour, algo que no es tan seguro para el Israel, que puede perder a buena parte de sus figuras. Por contra, ascienden al máximo nivel el Alpecin de Van der Poel y el Arkea de Nairo Quintana.