La mejor música para las noches de verano

En sus principales sedes (el Kursaal y el Victoria Eugenia en San Sebastián, el Palacio de Festivales en Santander) se sucederán gran parte de los conciertos llamados a atraer más público. Como es habitual, habrá agrupaciones comunes en ambos festivales como resultado de la colaboración que iniciaron hace diez años para gestionar de manera compartida los viajes de algunos artistas y orquestas, generalmente internacionales, y así reducir las emisiones derivadas de los traslados. Esos puntos de encuentro constituyen, por su importancia artística, puntos claros de referencia en sus respectivas programaciones.

El primer conjunto que actuará en ambos festivales será el Bach Collegium Japan, fundado por Masaaki Suzuki en 1990 con la finalidad de dar a conocer al público japonés las obras de Bach con instrumentos y prácticas originales. De su mano Suzuki alcanzó renombre mundial y una posición admirada por todos. En Santander ofrecerá la 'Pasión según San Juan' del Kantor de Leipzig (10-8) y en San Sebastián cuatro de sus cantatas (11-8). Otra formación muy relevante es la Budapest Festival Orchestra, que visitará las dos ciudades dirigida por Ivan Fischer y con obras de Prokofiev, Bartók (la violinista Patricia Kopatchinskaja como solista) y Dvorák en los atriles. Además, en el Kursaal la orquesta interpretará en una segunda velada la 'Sinfonía nº 38' de Mozart y su 'Réquiem' junto al Orfeón Donostiarra (17 y 18-8 en San Sebastián, 19-8 en Santander).

La unión de ambos festivales los llevará a presentar el montaje de danza y música en vivo 'Folia', a cargo de la Compagnie Käfig, el coreógrafo Mourad Merzouki y los músicos de Le Concert de l'Hostel Dieu (25-8 en San Sebastián, 27-8 en Santander). De Milán vendrá la Filarmonica della Scala con su titular, el gran maestro italiano Riccardo Chailly, para interpretar la exuberante 'Quinta' de Chaikovski y las suites de 'Daphnis et Chloe' de Ravel (27-8 en San Sebastián, 28-8 en Santander). Los conciertos de clausura también serán iguales con la presencia de la Orchestre Philarmonique de Radio France, el director Mikko Franck, la violonchelista Sol Gabetta y obras de Debussy, Lalo, Ravel y Stravinski (30-8 en San Sebastián, 31-8 en Santander).

A partir de ahí, cada festival marcará las pautas de su propia personalidad. En la Quincena hay que destacar la programación de una ópera escenificada, una tan popular como 'Carmen' de Bizet, en una nueva producción firmada por Emilio López que sumará a la dirección musical de José Miguel Pérez-Sierra las voces de Rihab Chaieb, Dmytro Popov, Miren Urbieta-Vega y Simón Orfila en los roles principales (8 y 10-8). Como primera orquesta invitada volverá la Filarmónica de Luxemburgo dirigida por Rubén Gimeno en dos conciertos: el inaugural (1-8) reunirá el Concierto para piano 'Egipcio' de Saint-Saëns con Bruce Liu como solista y la 'Quinta' de Mahler, mientras que el segundo (2-8) contará con el Coro Caso en La ejecución de 'Stefan Razin' de Shostakovich (programada por vez primera en la historia del festival) y concluirá con la 'Sinfonía Fantástica' de Berlioz. También unirán sus fuerzas el Orfeón Donostiarra y la Euskadiko Orkestra en la compleja y monumental 'Missa Solemnis' de Beethoven bajo la dirección de Jérémie Rhorer (23-8). Asimismo, se puede destacar el recital en el Victoria Eugenia de la jovencísima pianista Alexandra Dovgan con piezas de Beethoven, Schumann, Rachmaninov y Scriabin (19-8).

A su vez, el festival cántabro arrancará con la presencia de la Orquesta de la Comunitat Valenciana, destacada entre las españolas, junto al director James Gaffigan y la soprano Aida Garifullina (3-8). Tomarán su relevo dos días más tarde las voces de Sondra Radvanovsky y Jonathan Tetelman, acompañadas de la Sinfónica de Bilbao y Riccardo Frizza, en una gala operística dedicada en su mayor parte a Puccini (5-8). Actuarán también en el Palacio de Festivales la Sinfónica del Estado de São Paulo (17-8), la Barroca de Friburgo (22-8), la Sinfónica del Principado de Asturias (24-8) y, con un audaz programa desde Schoenberg hasta el presente, el Ensemble Sonido Extremo (30-8). Al piano se espera a dos grandes del teclado actual, ambas excepcionales pero de perfiles muy diferentes, como son Yuja Wang (9-8) y Maria João Pires, que compartirá su recital con Ignasi Cambra (25-8).

Más allá del auditorio del Kursaal y del Victoria Eugenia, la programación de la Quincena se diversifica en ciclos muy definidos que se expanden mucho más allá de la capital y de la propia provincia. El Museo San Telmo acogerá el ciclo de música antigua, con agrupaciones consolidadas como Al Ayre Español (3-8) al lado de otras emergentes como Egeria (9-8), remontando su mirada hasta la Edad Media, y el de música de cámara con Luis Fernando Pérez (4-8), el Cuarteto Elías (7-8) e Isabel Villanueva (24-8), entre otros. Son importantes también los ciclos de órgano, de música contemporánea (con varios estrenos absolutos a cargo de Spanish Brass, el Ensemble Música Práctica y el Cuarteto Cikada) y de jóvenes intérpretes, así como la Quincena Infantil, Tabakalera Dantzan y la Quincena Andante, que viajará hasta escenarios tan especiales como Chillida Leku, el Santuario de Aránzazu o el Monasterio de Leyre.

De manera paralela, el Festival de Santander reservará un espacio para propuestas modernas en el Centro Botín, con preciosas vistas a la bahía, y llevará la música de la ciudad a los pueblos de la comunidad a través del ciclo de Marcos Históricos, heredero de las noches musicales que tenían lugar en Santillana del Mar en los años cincuenta. En ellos ha escrito algunas de las páginas más luminosas de su historia y mantienen siempre una entrada muy buena a la llamada de sensaciones nuevas. El ciclo centra su mirada en músicas diversas pero, sobre todo, en la antigua, que permitirá la presencia de conjuntos e intérpretes de gran nivel (entre ellos Il Fervore, Amandine Beyer, Fahmi Alqhai, Iris Azquinezer o Kenneth Weiss) en municipios costeros como Castro Urdiales, Laredo, Noja, Comillas o San Vicente de la Barquera, pero también en marcos del interior en Miera, Reinosa o Viérnoles. Tanto hay para descubrir que no sería extraño que los conciertos más estimulantes se dieran en los lugares más inesperados.