Nos colamos en el backstage del GetxoModa: lo que no se ve, la emoción y los nervios del desfile

Entre bambalinas, cuando los focos todavía no iluminan la pasarela, GetxoModa se vive de una forma muy diferente. El backstage ofrece la otra cara, la que no se ve, la que esconde los entresijos de los cuatro desfiles de esta primera jornada. Es ese lugar en el que se mezclan las emociones, los nervios y las ganas de que todo salga perfecto. Y hoy en Muxikaberri se nota la entrega y la emoción que despierta GetxoModa.

Las primeras modelos han llegado a las doce de la mañana, las siguientes una hora más tarde. Se establecen dos turnos para que sea más fácil coordinarlas, ya que en total hay 20 maniquíes, 19 chicas y un chico. El primer paso es hacer el 'fitting', es decir, la prueba de vestuario. Los diseñadores tienen una fotografía de cada modelo con sus medidas para probarles los looks que mejor les sientan. Se trata de uno de los procesos más importantes porque hay que saber previamente cómo se mueve una prenda, cómo la defiende una modelo, cómo sienta un abrigo e incluso una cremallera...

El backstage está repartido en tres zonas: una sala de maquillaje y manicura, otra contigua de peluquería y, por último, hay una amplia estancia en la que los looks que presentará cada diseñador aguardan colgados en perchas. Tras el 'fitting', las modelos pasan a hacerse la manicura. Una labor que realizan dos esteticistas, que se han decantado por pintarles las uñas en color plata, en tendencia este otoño.

Después de una pequeña parada para comer, las modelos pasan por maquillaje y peluquería. Se han puesto en manos de cuatro maquilladoras, que les han realizado un 'beauty look' compuesto por una base jugosa y un eyeliner muy marcado. «Es mi séptimo año en GetxoModa y de momento está saliendo todo fenomenal. Es un día distinto, muy emocionante y de muchos nervios, porque de repente tienes que maquillar a tres chicas y se te acumula el trabajo», cuenta Patricia Martín, una de las maquilladoras. Las modelos aseguran que es un día largo, en el que tienen que meter muchas horas, pero también una experiencia muy gratificante. «Lo que me gusta es que nos juntamos todas, porque muchas ya somos amigas», afirma Olatz López, de 22 años, una de las maniquíes que desfilarán esta tarde. A Naiara Álvarez, modelo de 23 años, le hace especial ilusión participar en GetxoModa. «Soy de Algorta y me parece emocionante que se hagan este tipo de eventos en mi pueblo, además van a venir mis padres y mis amigas a verme».

Mientras unas pasan por maquillaje, otras entran en la sala de peluquería. Allí cinco profesionales peinan a las modelos, que comenzarán luciendo una doble coleta para posteriormente quedarse únicamente con la superior, es decir, con un semi recogido. «Las chicas entran de dos en dos y les realizamos unas suaves ondas, muy naturales, para después recogerles el pelo», cuenta Susana Serrat, una de las peluqueras del equipo.

Sobre las 16.20 horas ha tenido lugar el primer ensayo. La directora de los desfiles, la conocida estilista y peluquera Amaia Lauzirika, se encarga de dar órdenes a las modelos junto a Eder Aurre, que participa en la coordinación del backstage como coreógrafo. En este momento, las maniquíes tienen que aprender «dos o tres pautas» sobre su forma de andar en la pasarela o la actitud que tienen que demostrar en función de los deseos de cada diseñador. «Algunos prefieren que salgan a escena de forma más tranquila, otros quieren que sonrían o que se mueven a un paso más acelerado...», desvela Andrea Donati, director de la agencia SF40, que representa a la mayoría de las modelos que desfilan hoy en GetxoModa. «Está siendo una gran experiencia vivir esta cita con la moda desde dentro, conocer las tripas y ver el gran trabajo previo que hay detrás», afirma el portugalujo Eder Aurre, la gran promesa del diseño vasco.

«¡Silencio!» A las 17.20 horas se realiza el ensayo general. Eder da paso a las modelos para que salgan a la pasarela, se comunica con Amaia mediante un pinganillo para que todo esté perfectamente coordinado. Nada se deja al azar ni a la improvisación. Suena la música y las maniquíes salen a escena. Parece que todo va a ir sobre ruedas, que ya están listas para desfilar a las 20.15 horas en el homenaje que se realizará al prestigioso peluquero y estilista de Plentzia Gonzalo Zaura y a continuación mostrarán la colección de la joven diseñadora catalana Lucía Alcaina. Más tarde las modelos lucirán las creaciones de las nuevas promesas de la moda y, por último, los diseños del modisto murciano Pedro Lobo. La jornada se presenta intensa, pero en Muxikaberri sobran las ganas. Que se enciendan los focos que el talento está esperando entre bambalinas.