Sábado, 6 de febrero 2021, 16:50
La modista, junto a uno de los vestidos de la Fundación Agatha Ruiz de la Prada que apenas se ha visto en exposiciones. Ese estampado, que simula un racimo de uvas, es una de las prendas más llamativas.
IGOR MARTIN
El corazón en fucsia, su color preferido y marca de sus etiquetas, es el icono más repetido en el imaginario de la diseñadora de familia aristócrata.
IGOR MARTIN
"Desde pequeña me encantan los colores y me protejo con ellos. Es una protección contra las malas vibraciones, la tristeza, la infelicidad...", afirma la creadora a este periódico.
IGOR MARTIN
Para la temporada primavera-verano 2013 tejió diferentes vestidos llamados 'Michelín' sin que se tratara de ninguna colaboración con la marca de neumáticos.
IGOR MARTIN
Tristán, hijo y colaborador de Agatha Ruiz de la Prada, en el Centro de Exposiciones Fundación Vital.
IGOR MARTIN
Momento de la presentación de 'Agatha', la exposición de piezas únicas desde los ochenta hasta nuestros días. En el suelo se ven las alfombras, uno de los últimos productos que ha puesto a la venta.
IGOR MARTIN
Las paredes del Centro de Exposiciones Fundación Vital se han vestido de los colores del arcoiris que se repiten en el imaginario de la modista.
A lo largo de su carrera ha colaborado con fotógrafos de reconocido prestigio como Kiko Alcázar (imagen)
A su colección de vestidos 'chic' sin estampados se les suman unas formas atrevidas que parecen sacadas de un "cuento de hadas", como los definió Vargas Llosa.
IGOR MARTIN
La creadora reconoce encontrarse más cerca estílisticamente de
IGOR MARTIN
En una de sus últimas líneas de vestidos se refleja la influencia de creadores como Cristóbal Balenciaga.
Formas sinuosas, atrevidas e incluso difíciles de vestir le interesan como "diversión". De hecho, una serie de sus vestidos más conocidos son las Meninas.
IGOR MARTIN
El corazón fucsia, imagen de marca de la diseñadora de moda.
IGOR MARTIN
Uno de los catálogos que se exponen en las vitrinas a la entrada de la sala de la calle Postas.
La propia cartelería de los desfiles y promociones de la creadora en los últimos años mantienen el diseño y la identidad Ruiz de la Prada.
En 1994 empezo a desarrollar vestidos en los que se repetían las teclas de un piano.
IGOR MARTIN
Los estampados con letras y su propio nombre se repiten en su ideario como una búsqueda para reseñar su propia identidad.
IGOR MARTIN
Una visión optimismo y "una protección contra la tristeza". Esas son las señas que pretende trasladar también en desfiles y promociones.
IGOR MARTIN
Ha realizado numerosos proyectos con fotógrafos de prestigio como Christopher Makos o Kiko Alcázar (imagen).
Los vestidos con ruedas se repiten en su catálogo conocidos como "vestido taca-taca".
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