Policías uniformados y de paisano velarán por la seguridad en un Santo Tomás que se prevé multitudinario
Los operativos de seguridad y limpieza redoblan esfuerzos para afrontar una cita que, tras los años de pandemia, podría batir récords de asistencia, como lo hizo Aste Nagusia
Tras dos ediciones en vacío, y tres años después de la última cita, regresa Santo Tomás. Será este miércoles y se espera una participación multitudinaria para la edición número 73, lo mismo que el renacimiento de Aste Nagusia este año batió récords históricos de afluencia. El Ayuntamiento de Bilbao quiere estar preparado y ha organizado un operativo especial de seguridad, con más agentes y policía de paisano; también de limpieza, con 190 operarios que se encargarán de la recogida de basura; inspectores de Salud para garantizar que los alimentes estén en buen estado; y una reconfiguración del transporte público.
En este operativo, que se prolongará hasta el jueves, participa personal de varios ámbitos: Seguridad Ciudadana, Movilidad y Sostenibilidad, Servicios y Calidad de Vida, y de Salud y Consumo. Como siempre, se recomienda el uso de transporte público para acudir al recinto festivo, esta edición situado en El Arenal y no en la Plaza Nueva, reubicación que ha disgustado a los baserritarras. En el ámbito viario, desde las 7:30 horas hasta las 22:30, aproximadamente, permanecerán cerradas al tráfico las calles Sendeja (a la altura de la Plaza Ernesto Erkoreka), Ribera (a la altura del Puente de la Merced) y el Puente del Arenal (a la altura de la calle Bailén).
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En materia de Seguridad Ciudadana, como es habitual, la Policía Municipal y la Ertzaintza han establecido un dispositivo especial preventivo que está en marcha durante las fechas navideñas y en periodo de rebajas. Arrancó el pasado fin de semana y presta especial atención a jornadas como Santo Tomás, en la que se espera una afluencia masiva de gente. Durante todo el día se establecerán patrullas uniformadas de ambos cuerpos policiales, tanto en el interior del Arenal como en sus inmediaciones. Patrullas que tienen un componente disuasorio y preventivo. Junto a ellas, también habrá agentes no uniformados.
Se controlará también el perímetro del mercado con controles fijos en puntos como la Plaza Ernesto Erkoreka y la Plaza Circular con calle Navarra para velar en todo momento por la seguridad ciudadana. El Puesto de Mando Avanzado, desde el que se coordinarán las emergencias y las posibles intervenciones, se instalará en la trasera del edificio principal del Ayuntamiento. Los hurtos suelen ser el delito más frecuente. En la edición de 2019, de 27 delitos denunciados ante la Policía Municipal de Bilbao, 24 se correspondieron con hurtos.
El Ayuntamiento de Bilbao recupera para esta jornada festiva y tan multitudinaria el Punto de Información que ya instaló en Aste Nagusia. Frente al Teatro Arriaga, cerca de la Churrería de El Arenal, habrá una carpa donde la ciudadanía podrá conocer los recursos con los que cuenta en el caso de que ser víctima o testigo de una agresión sexista. Este stand que se denomina 'Maite Jokoa' será un espacio ambientado con una serie de mensajes relacionados con la educación sexual servirá de photocall, donde cuadrillas de jóvenes y mayores podrán hacerse fotografías y videos en este punto morado y se les invitará a difundir en las redes sociales con el #SoloSÍEsSi #BakarrikBaiDaBai #MaiteJokoa.
Por su parte, el operativo de limpieza estará integrado por 193 personas entre los turnos de mañana, tarde y noche del 21 de diciembre, así como la mañana del 22, momento en el que se dará por finalizado. Se habilitarán hasta 386 contenedores y cubos de diferentes fracciones para propiciar la recogida separada de residuos: 86 de orgánica, 70 de envases, 82 de papel y cartón, 124 vidrío y 24 aceite.
También se colocará malla de protección en la barandilla de la ría en los recintos de actividad con el objetivo de evitar el derrame de residuos a la lámina de agua. De forma paralela, el barco de limpieza de la Ría estará realizando tareas de limpieza durante el día. En la edición de 2019, se recogieron más de 102,6 toneladas de residuos; 28,6 de ellas a la fracción vidrio; 5,6 a la de papel-cartón; 1,6 a envases, 0,4 a aceite; y, 66 a la fracción resto. No se recicló mucho.
Por último, en cuanto a seguridad alimentaria, un equipo de inspectores que recorrera los distintos puntos de exposición y venta de alimentos para garantizar que cumplen con los requisitos higiénicos sanitarios exigidos por la legislación y comprobar la calidad sanitaria, origen, exposición, conservación, etiquetado o identificación y documentación de origen de los productos expuestos para la venta.
