La aparición de un sospechoso reabre un triple crimen sin resolver cometido en Burgos en 2004
Del mismo pueblo que el matrimonio y el hijo de 12 años que murieron tras ser apuñalados, el hombre se encuentra en prisión por atropellar a una mujer que vivía en su entorno. La Guardia Civil registró su casa en Briviesca en busca de pistas
elcorreo.com
Miércoles, 31 de mayo 2017, 11:08
La Guardia Civil de Burgos ha reabierto el caso del triple 'crimen de los Barrio', en el que murieron un matrimonio y su hijo pequeño, de 12 años, ante la aparición de un nuevo sospechoso, que se encuentra en prisión por la muerte de una mujer que vivía en su entorno.
Fuentes de la Guardia Civil han confirmado a Efe que Ángel Ruiz, el sospechoso, fue llevado ayer a su domicilio, en Briviesca, y a una lonja de su propiedad, donde se efectuó un registro en busca de pruebas o indicios que lo relacionen con el crimen que se cometió en Burgos el 8 de junio de 2004. El matrimonio asesinado -Salvador Crisanto Barrio, que tenía entonces 53 años, y su esposa, Julia Dos Ramos, de 47-, tenía una vivienda en la comarca de la Bureba de donde también es el sospechoso.
Ruiz está en prisión por atropellar mortalmente a Rosalía Martínez, de 84 años, con la que había tenido una discusión. Durante las investigaciones de este hecho, la Guardia Civil descubrió que el hombre guardaba un gran número de llaves y ganzúas, entre las que está una que abre el despacho del alcalde de La Parte, puesto que ocupaba Salvador Barrio cuando fue asesinado, y con el que tampoco mantenía buenas relaciones, según ha informado el Diario de Burgos.
Pintadas ofensivas
De hecho, Ruiz fue condenado por un delito contra el respeto a la memoria de los muertos al ser autor de unas pintadas ofensivas contra los Barrio que aparecieron en el cementerio de la localidad burebana. La investigación está siendo tutelada por la jueza decana de Burgos, Blanca Subiñas, que es la misma que llevó la investigación del anterior sospechoso, Rodrigo, el hijo mayor de la familia, que fue detenido y descartado como autor del crimen en 2010.
El matrimonio y su hijo aparecieron en su domicilio cosidos a puñaladas, después de que sus familiares hubieran denunciado su ausencia. El homicidio múltiple se cometió por la noche y se sospecha que la pareja podría haber dejado pasar a su domicilio al agresor, ya que ni las puertas ni las ventanas de la vivienda fueron forzadas. La familia se había mudado a la capital de Burgos hacía año y medio.