Los amigos del joven donostiarra muerto en Salamanca insinúan que pudo fallecer por ingesta de drogas

Las declaraciones de los amigos de Pablo Echezarreta, el donostiarra fallecido el fin de semana en Salamanca, llevaron a la Policía a intuir que la muerte del joven podría estar motivada por ingesta de drogas. Por el momento, y a la espera de los resultados de la autopsia, los testimonios de los amigos están resultando claves en la investigación.

La Policía salmantina mantiene todavía abierta la investigación para esclarecer las circunstancias que rodearon el caso. Pablo Echezarreta fue hallado sin vida el sábado en la habitación de la residencia donde se hospedaba en compañía de una veintena de amigos, que celebraban en la capital charra la despedida de soltero de uno de ellos.

Fuentes de la Subdelegación del Gobierno informaron de que la Policía no halló en la habitación ni tampoco entre las pertenencias de la víctima resto alguno de droga. Las mismas fuentes precisaron que la sospecha de que Pablo pudo haber ingerido algún producto estupefaciente es una deducción, después de que varios de sus amigos manifestaran que ellos sí las tomaron. "Aunque eso fue lo que dijeron, no tenemos ninguna certeza de que él también consumiera y en tanto no dispongamos de los resultados de la autopsia, por respeto hacia su persona, a su familia y allegados, es aventurado pronunciarse sobre lo ocurrido", afirmó ayer Javier Galán, subdelegado del Gobierno en Salamanca. Galán aprovechó para expresar sus condolencias a la familia de la víctima y lamentó que "un joven que venía a conocer y disfrutar de nuestra ciudad haya encontrado la muerte en estas circunstancias".

Los resultados de la autopsia al donostiarra tardarán meses en conocerse. Varias muestras de su organismo han sido remitidas al Instituto Nacional de Toxicología de Madrid y, junto a un estudio histopatológico, determinarán en definitiva la acusa que desencadenó el fallo multiorgánico que le produjo la muerte. El estudio servirá para conocer si la víctima, de 32 años, presentaba alguna patología coronaria que pudo agravar su estado tras la ingesta, según precisan informaciones policiales, de sustancias estupefacientes en las horas previas. Fuentes consultadas han indicado que aun cuando los resultados de las muestras de sangre y orina remitidas puede que se conozcan antes, el informe final tardará meses.

El cuerpo de Pablo Echezarreta fue incinerado en Salamanca y esta tarde se oficiará el funeral en la parroquia del Iesu, de Riberas de Loiola.