Policía Municipal y Ertzaintza intensifican sus patrullas en San Francisco para frenar los delitos

Los dos cuerpos policiales se han repartido la zona por tramos de calle. Además de los tradicionales puntos fijos con efectivos apostados en la calle San Francisco o en la plaza Corazón de María que llevan ya décadas, ahora los agentes tienen órdenes de patrullar a pie. Los policías municipales están especialmente centrados en la calle Dos de Mayo, donde la concentración de personas en las aceras impedía incluso el paso de los peatones. Tanto la Ertzaintza como la Policía local, que se han reunido con representantes de la nueva asociación vecinal, despliegan en San Francisco efectivos de paisano, que pueden observar sin levantar sospechas, y furgonetas con agentes de la Brigada Móvil. Su presencia se refuerza también con la Oficina Local de Inteligencia (OLI) de la Policía autonómica y la recién creada Unidad de Inteligencia de la guardia urbana, que controlan el barrio para conocer qué tipo de delincuencia se está registrando y poder así adoptar medidas preventivas.

La voz de alarma que lanzaron los vecinos en septiembre se ha visto corroborada por las estadísticas oficiales. El concejal de Seguridad Ciudadana, Tomás del Hierro, reveló en una comparecencia pública ante la oposición la semana pasada que la delincuencia se ha disparado un 18% en lo que va de año en los barrios de San Francisco, Bilbao La Vieja y Zabala. De enero a septiembre se han registrado un total de 1.213 delitos, con especial incidencia entre los meses de verano, como venían advirtiendo los residentes.

El delito estrella es el robo de teléfonos móviles, aunque también se han registrado lesiones, daños, hurtos o violencia de género. El edil explicó que los aparatos sustraídos terminan por lo general en el extranjero, principalmente en países africanos, y apuntó a jóvenes de entre 15 y 25 años llegados del Magreb y «sin arraigo», como los principales autores de estos asaltos. Para atajar este «pico de inseguridad ciudadana», en palabras de Del Hierro, se va a «ampliar el dispositivo policial actual», una medida que ya se está visualizando en el barrio. También se han desarrollado redadas en la calle García Salazar, donde los policías han identificado a los clientes de varios negocios.

Ante esta situación, las autoridades se han propuesto diseñar «planes de actuación conjunta» con la Ertzaintza. Las 18 cámaras de vídeo vigilancia instaladas en el barrio desde marzo de 2009 con el objetivo de prevenir la comisión de delitos se han quedado obsoletas y el Consistorio bilbaíno va a invertir 48.500 euros en modernizarlas.