«Lo mejor es el cariño de la gente»

La fundadora y actual responsable de la agrupación de Protección Civil de Erandio, Maite Vicente, mantiene intacta la ilusión que le llevó en un lejano 1990 a ponerse manos a la obra para ayudar de manera altruista a sus vecinos, en cualquier catástrofe, accidente o actividad cultural o deportiva en la que se requiriera su presencia. La idea de crear el grupo fue de César Pérez, anterior jefe de la Policía Local, que lo propuso a diversos integrantes de asociaciones locales. «Acepté de inmediato». En aquellos inicios se llegaron a reunir «más de 50 personas participando en cursillos de formación, o simulacros, pero este número se fue reduciendo de manera paulatina debido a que mucha gente pensaba que iba a cobrar, cuando esto es totalmente altruista». Actualmente cuenta con un grupo de nueve personas que en ocasiones especiales puede ascender a quince colaboradores, algo que «no es fácil de coordinar, porque algunos trabajan y no pueden acudir cuando se les necesita».La encargada resalta principalmente el espíritu de «ayudar de manera desinteresada a los demás», por lo que emprenden campañas de recogida de alimentos para los más necesitados o recorren las calles en el crudo invierno buscando a gente sin techo para ofrecerles cobijo. «Siempre estamos para ofrecer nuestra mano a todo aquel que nos la pida», se congratula.

En la actualidad, su vistoso uniforme azul y naranja se ve en todas las fiestas patronales, carnavales, parques de Navidad o pruebas deportivas que tienen lugar en la localidad, siempre en «perfecta coordinación con la Policía Local». Lo mejor de tanto trabajo es «el cariño de la gente, de los vecinos, pero también hay personas, las menos, que no nos respetan ni obedecen a nuestras indicaciones. Piensan que cobramos por esta labor cuando es incierto», asegura con un halo de tristeza.

Su labor se ha extendido a lo largo de estos años más allá de las fronteras del propio municipio colaborando en la seguridad de «la herri krosa de Bilbao, la carrera Bilbao-Bilbao, o el Critérium Internacional de Getxo, donde nos han llamado hemos acudido». Todo ello pese a los sinsabores que en otras ocasiones supone que «por parte de alguna organización nos traten como porteros o recadistas y ese no es nuestro papel». La jefa del cuerpo vivió una de sus experiencias más desagradables en una prueba ciclista Bilbao-Bilbao. «En Galdakao, mandé parar a un conductor porque venían muchos ciclistas y no me hizo caso. Continuó su marcha y se estrelló contra otro. Encima dijo que yo le había mandado continuar y tuve hasta cuatro juicios de los que salí absuelta, pero el disgusto no me lo quita nadie». Vicente reconoce que «necesitamos algún aliciente para que la gente se anime a integrarse en la agrupación, para seguir adelante. A veces estamos horas y horas de servicio en alguna prueba deportiva y no nos dan ni un bocadillo», se quejó. Considera básico contar con mejores medios como «un local en condiciones, o un simple ordenador con conexión, para poder desarrollar mejor nuestra labor», reclama la responsable de una de las agrupaciones de Protección Civil más veteranas de Bizkaia.