La madre de Alex a los acusados de darle la paliza: «¿Por qué le habéis hecho esto?»
Los procesados sólo reconocen un botellazo y los golpes recogidos en los vídeos y alegan que habían bebido
Ana Claudia Ionita puso este lunes voz al sufrimiento de su hijo Alex, que quedó en estado vegetativo de por vida por una paliza en ... el verano de 2021 en Amorebieta cuando sólo tenía 24 años. La mujer declaró por él en la primera sesión del juicio que se sigue desde este lunes contra los siete adultos acusados de la agresión en la Sección Primera de la Audiencia vizcaína -el año pasado fueron condenados siete menores a medidas de internamiento cerrado-. Él no puede hablar ni moverse por las graves secuelas que arrastra a raíz de la agresión.
Era la primera vez que la madre tenía tan cerca a los procesados más mayores. A petición de la acusación particular, los padres intervinieron en primer lugar y detrás de un biombo para no tener que enfrentarse a los presuntos agresores. «Quiero preguntarles por qué y para qué le han hecho esto. Si pueden contestar», lanzó a través de una traductora de rumano a los acusados, que permanecían cabizbajos sentados en las primeras filas del público, custodiados cada uno por dos agentes de la Ertzaintza y esposados.
«Ni para mí ni para mi hijo hay vida ya. Necesita ayuda para todo», explicó la mujer, que se encarga de su cuidado permanente. Antes, era un joven sano, que trabajaba con su padre como albañil en obras de construcción y ahora permanece encamado, necesita pañal y sólo mueve una mano. Gracias a la fisioterapia, ha empezado a pronunciar algunas palabras como 'mamá' o 'agua', como si hubiera vuelto a nacer. Tiene reconocido el grado máximo de dependencia del 91% y está pendiente de una posible reconstrucción de un hueso del cráneo aplastado por los golpes y que podría mejorar ligeramente su mermada calidad de vida. Los médicos no le han dado ninguna «esperanza» de que pueda recuperarse, aunque el padre admitió que a veces piensa que «Dios le va a sanar».
Moños y muñequeras
Se trata de uno de los casos que más han conmocionado a la opinión pública por las terribles consecuencias sobre la víctima y su familia y por la violencia gratuita y absurda con que se cometió la agresión grupal, en un parque de Amorebieta en plena madrugada hace ya dos años y medio. Ni siquiera el primer día del juicio se aclaró el motivo de la supuesta pelea. Uno de los acusados reveló que fue a pedirle un cigarro cuando Alex estaba con un amigo en las campas de Jauregiberria, sobre las tres de la madrugada del 25 de julio de 2021, y que él le dio «un manotazo».
También ha sido uno de los procesos más mediáticos de los últimos años en Bizkaia. Una quincena de medios de comunicación cubrían este lunes la sesión, entre ellos seis cadenas de televisión y 16 radios, además de los periódicos más importantes.
Noticia relacionada
«No hay castigo que pague ni un 1% de lo que sufre mi hijo»
Después de los padres de la víctima, llegó el turno de los acusados, cada uno de los cuales estaba representado por un letrado. Sólo uno, el mayor de todos, de más de 40 años, se encuentra en libertad provisional porque no aparecía en las imágenes golpeando al chico. Los demás están presos de forma preventiva. Dos rechazaron declarar y otros dos se negaron a responder a las preguntas de la acusación particular, que representa a Alex y a su familia, aunque sí contestaron a la fiscal y a las defensas.
Por el estrado desfilaron veinteañeros vestidos con vaqueros rotos, plumíferos y playeras que apenas recordaban nada de lo que ocurrió aquella trágica noche en Amorebieta. «No me acuerdo». «Estaba muy borracho». «Había tomado y consumido». «Si aparece en el vídeo, sí», fueron las frases más repetidas por la mayoría. Los que hablaron intentaron exculparse y sólo reconocieron haber participado en lo evidente, en las agresiones que habían quedado retratadas por los tres vídeos de 50 segundos aportados a la causa como prueba principal. Las imágenes fueron grabadas por uno de los implicados y hechas públicas en redes sociales por otro. Después, se compartieron y viralizaron y gracias a ellas la Ertzaintza pudo identificar a más de una quincena de implicados. «Las colgué al día siguiente en Tik Tok porque me sentía culpable, estaba mal», admitió el sexto implicado en declarar, junto con un mensaje que rezaba: «No me culpen porque estaba pedo».
«¡Matarle, matarle!»
La Fiscalía pide para cada uno de ellos 14 años y ocho meses de prisión por asesinato en grado de tentativa y la familia, la prisión permanente revisable al entender que formaban parte de una banda criminal y acusarles también de robo con violencia y omisión de socorro. Según la fiscal, en el vídeo se escucha cómo alguien jalea a los agresores: «¡Matarle, matarle!» o «¡grábalo!».
El primer acusado en declarar reconoció que asestó un golpe a Alex, como se refleja en uno de los vídeos que se expusieron en la sala, y que le robó el móvil, aunque alegó que su intención inicial era la de «separar». En un testimonio lleno de contradicciones, el joven vio cómo la víctima recibía un botellazo y patadas, aunque no supo identificar con claridad quién los propinó. Reconoció que los agresores se marcharon juntos a coger el tren a Bilbao y que dejaron a Alex tirado en el suelo sangrando.
Admitió que «de pequeño» pertenecía a la banda de Los Hermanos Koala, «un grupo de whatsapp para jugar a fútbol y quedar», pero que «se separó» de ellos a los «18 o 19 años». El mayor de los acusados afirmó que cuando empezó la pelea, abandonó el lugar, y los demás coincidieron en su versión de que no participó en la refriega. El tercer procesado esgrimió un palo, según las imágenes, aunque «no tengo conciencia de cómo llegó a mis manos», dijo. Y el sexto insistió en que estaba «muy borracho» y apuntó que había sabido quiénes eran 'los Koala' ya en la cárcel al leer informaciones periodísticas.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión