Investigan una oleada de robos en Bilbao en los que el autor rocía a las víctimas con spray

El primero de los asaltos se registró en la madrugada del pasado sábado en la calle Conde Mirasol, en el barrio bilbaíno de San Francisco. A partir de ese momento y durante los días siguientes, los casos se reprodujeron, especialmente por las noches. El objetivo del ladrón es dejar a las víctimas bloqueadas y apoderarse, prácticamente sin resistencia, de sus teléfonos móviles y bolsos.

En la madrugada del domingo, un individuo de 20 años fue identificado en un local de apuestas de la calle Autonomía después de que el interior del establecimiento fuera rociado con gas pimienta y una mujer denunciara que, en medio de la confusión, le habían sustraído el móvil. Asaltos similares se han registrado en la plaza de la Encarnación y de nuevo en Conde Mirasol, además de en otros puntos de la ciudad.

La mayoría de las víctimas son mujeres. Por ejemplo, la joven que denunció el robo en las escaleras de la Encarnación explicó a los agentes que el domingo regresaba a casa sobre las cuatro y cuarto de la madrugada cuando fue abordada por un desconocido. Sin mediar palabra, el agresor le aplicó el aerosol en la cara. Después, la agarró con fuerza por los brazos y la arrojó al suelo, lo que le ocasionó lesiones leves. El delincuente consiguió apoderarse de su bolso mientras ella salía corriendo en busca de ayuda. Le sustrajo la cartera con dinero, documentación y tarjetas bancarias.

Minutos más tarde y en la misma zona, un chico de origen magrebí que caminaba solo también fue atacado con un spray de pimienta. El asaltante estaba escondido, a la espera de su víctima, que no se percató inicialmente de su presencia ya que estaba distraído enviando mensajes por su móvil. El ladrón le robó una bandolera con dinero, su tarjeta de crédito y el teléfono antes de salir huyendo en dirección a la calle San Francisco.

Varios vecinos de Santutxu también han denunciado en una página de Facebook que han sufrido robos por el mismo método, aunque se desconoce si lo han denunciado. «Sobre la una de la madrugada del sábado al domingo, voy subiendo la cuesta de Camino del Bosque», relata en presente una de las afectadas, y un individuo «me coge por detrás y me rocía la cara con spray pimienta. No contento con eso me mete la rodilla para tirarme al suelo y robarme el bolso».

Otro internauta comenta también el asalto sufrido por su esposa en el grupo Sagarminaga. Un ladrón «ha sorprendido por la espalda a mi mujer a las 4.15 de la mañana cuando se disponía a coger el coche, la ha tirado, pateado y se ha llevado el bolso con las llaves, el dinero y las tarjetas. Y la ha dejado hecha una mierda teniendo que acudir de urgencia a un hospital», escribe.