Pradales tilda de «decepcionante» la reunión sobre el reparto de menas con La Moncloa y las comunidades: «No es justo ni equitativo»

Después de que la Diputación vizcaína declarara el pasado jueves el estado de «excepcionalidad» para hacer frente a una llegada masiva de menas que han colapsado los centros de acogida, el Ejecutivo autonómico reclamó en el encuentro que se fije un protocolo para el reparto de los chavales, que se aporte financiación económica y se defina un itinerario educativo y de inserción para ellos. Esto último es lo que no se puede hacer ahora mismo en algunos centros de Bizkaia porque los educadores ya no dan abasto.

Pradales ha reiterado que el sistema está «absolutamente tensionado» porque Euskadi es una «comunidad solidaria», en la que hay ya más de 900 menores no acompañados, mientras que, ha censurado, hay «alguna comunidad limítrofe que apenas tiene una decena».

El jefe del Ejecutivo autónomo ha subrayado que lo que Euskadi está pidiendo es «un reparto justo, equilibrado y equitativo» de estos menores. «Estamos invirtiendo muchísimos recursos públicos y hay comunidades que no están atendiendo apenas a ninguna persona. »No están siendo solidarias, el reparto no es equitativo y, además, no están dedicándole recursos públicos a esta cuestión«, ha añadido.

Pradales ha lamentado, en este sentido, que siendo éste un tema «muy relevante», ayer «no se quiso tratar, no se quiso entrar en la cuestión de verdad». «Fue decepcionante», apostilló el lehendakari, no sin antes añadir que volverá a poner el tema encima «de la mesa que corresponda»..

En términos similares se pronunció la víspera la consejera vasca de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico. Nerea Melgosa se mostró la tarde de este martes «defraudada» tras participar en la Conferencia Sectorial de Infancia y Juventud en la que el Gobierno central y las comunidades abordaron la incesante llegada de menores extranjeros no acompañados.

Melgosa lamentó que Euskadi sea «el cuarto» territorio del país que mayor número de menores extranjeros tutela por detrás de Canarias, Ceuta y Melilla, donde la presión migratoria se mantiene en cifras récord desde el año pasado. Ha contrapuesto la situación de una comunidad autónoma colindante –de la que no dio el nombre– que, según se dijo en la Conferencia Sectorial, acoge apenas a 10 chavales.

La consejera exigió un «plan serio» para que «Euskadi pueda trabajar bien, en condiciones y enfocada en los derechos humanos en vez de en cifras de reparto». También reivindicó que las administraciones deben dar a los menores extranjeros no acompañados «esa infancia y esa acogida que merecen».