El funicular de Artxanda mantiene la maquinaria original de hace 37 años

Además, todas las piezas del funicular, desde la vía, hasta el vagón y la sala de máquinas está construído en Euskadi. El Ayuntamiento tuvo claro desde un principio que el camino era apostar por las empresas cercanas y locales, y eso tiene sus ventajas. «Es un lujo, porque si necesitamos alguna reparación las compañías están aquí al lado. Es un beneficio», aclara Montoya. En la construcción de las nuevas instalaciones participaron, entre otros, Irizar y Goimendi.

Asimismo, el funicular quiere ser un servicio trasnparente y cercano. Como pocas empresas hacen, quiere enseñar su funcionamiento a la ciudadanía. Hace unos años puso en marcha visitas guiadas gratuitas -sólo hay que validar la Barik- en castellano y euskera. Suelen ser los sábados de todos los meses a las 11.30 horas. Cada grupo acoge un máximo de 30 personas, por lo que es preciso realizar la reserva previamente, en el teléfono municipal 010 /94 401 00 10 -de 8.00 a 20.00 horas-.