El PNV coloca a los alcaldes de Sestao y Muskiz en cargos públicos recién creados

El último en dar este paso ha sido Josu Bergara, hasta ahora primer edil de Sestao. Tal y como adelantó ayer este periódico, el político vizcaíno dejará en los próximos días la Alcaldía para pasar a trabajar en el equipo de Unai Rementeria (PNV). Así lo confirmó la institución foral en una nota pública. Las primeras hipótesis le situaban al frente de la Dirección de Relaciones Municipales, dentro del organigrama del Departamento de Administración Pública y Relaciones Institucionales dirigido por Elixabete Etxanobe. Finalmente sí estará dentro de ese área, pero en un cargo que nueva creación.

Bergara (42 años) será a partir del próximo martes «director general de Administración Local», un puesto inédito en estos momentos y que deberá buscar su encaje en la actual estructura del departamento, donde continuará trabajando el director de Relaciones Municipales. Serán, por lo tanto, dos altos cargos encargados de gestionar el entendimiento entre la Diputación y las 112 localidades del territorio histórico. Fuentes forales descartaron que sus tareas vayan a solaparse en ningún caso y emplazaron a una comparecencia de Etxanobe en las Juntas Generales, donde dará explicaciones sobre la reestructuración de su área.

Según el documento 'Retribución de los altos cargos 2019-2022' que la Diputación publica en su web oficial, los directores generales cobran cada ejercicio algo más de 85.000 euros brutos. Del Departamento de Administración Pública y Relaciones Institucionales dependen, en estos momentos, cuatro direcciones generales: además de Relaciones Municipales, están Servicios Corporativos; Atención Ciudadana y Servicios Digitales; y Régimen Jurídico y Función Pública.

En el caso de Borja Liaño, su nuevo cometido tras dejar la Alcaldía de Muskiz será la coordinación e impulso de los planes estratégicos para las comarcas desfavorecidas que el programa Berpiztu desarrollará en la Margen Izquierda, la Zona Minera y Las Encartaciones. Este puesto, también de reciente creación, dependerá orgánicamente de la Diputación de Bizkaia y del Gobierno vasco, que aportarán fondos públicos desde sus respectivos presupuestos. Aunque los proyectos concretos que se pondrán en marcha aún no han sido dados a conocer, Liaño podría llegar a gestionar hasta 60 millones de euros para tratar de relanzar económicamente dos de las comarcas de Euskadi más azotadas por el paro.

El trabajo de Liaño (49 años) implicará a distintos departamentos y viceconsejerías que estarán al frente de los distintos proyectos en cada comarca, y que abarcará ámbitos como Transportes, Salud, el Parque Tecnológico de la Zona Minera que se está desarrollando en la vecina Abanto, programas de impulso de empleo o la descontaminación de suelos industriales. «Mis funciones serán de coordinación y garantizar que esto no se quede quieto», anunció el propio Liaño a finales de marzo, tras confirmar su marcha del Ayuntamiento de Muskiz. Como Bergara, ésta era su tercera legislatura con la 'makila' de alcalde, aunque en su caso gobernaba en coalición con el PSE.

Estos movimientos protagonizados por políticos del PNV, sobre todo el de Bergara, desataron ayer las críticas de los partidos de la oposición en Juntas Generales. Denunciaron que los jeltzales utilizan la Diputación como una «agencia de colocación» para sus afiliados. Además, pusieron el acento en que se haya creado un puesto ad hoc para el hasta ahora alcalde de Sestao que nadie creía necesario. Un argumento que la Diputación ya había tratado de amortiguar de antemano en la nota que publicó por la mañana.

En ese comunicado, el diputado general enmarcó el 'fichaje' de Bergara dentro de la crisis de gobierno que puso en marcha el mes pasado para «estar más cerca y trabajar más juntos» con los municipios vizcaínos. Etxanobe también se refirió a «intensificar las relaciones con los ayuntamientos». «Queremos ir más allá de los cauces formales para poder atender las necesidades de los municipios de una forma más directa y cercan», expuso la diputada.

Fuentes de Sabin Etxea, por su parte, justificaron los nombramientos de Bergara y Liaño y pusieron en valor su «amplia experiencia como alcaldes, con una gestión contrastada» de la que podrán echar mano en sus nuevos cometidos. «¿Quién mejor que un primer edil de esa comarca, que la conoce a la perfección, para desarrollar proyectos estratégicos allí?», apuntaron en referencia a Liaño. «Y en la Diputación hacía falta una figura de 'alcalde de alcaldes' de Bizkaia y Bergara tiene diez años de experiencia en este terreno», añadieron.

Las mismas fuentes también apuntaron que la decisión de sustituir a un primer edil en el ecuador del mandato es una práctica habitual entre los partidos, con la que buscan dar una presencia pública de al menos dos años al frente de la Alcaldía al futuro candidato en las siguientes municipales. Y señalaron al PSE y su decisión de relevar a Miguel de los Toyos al frente del Ayuntamiento de Eibar. En su caso, a un cargo ya existente en el Gobierno vasco.