Los 'Hispanos' quieren sus anillos

Nunca entenderé que todo un subcampeón de Europa tenga que jugarse su presencia en unos Juegos en un torneo preolímpico, donde suele pasar un poco de todo y un día malo puede echar por tierra muchos años de trabajo y éxitos. Me parece una fórmula fallida que penaliza a algunas de las mejores selecciones del mundo y las deja fuera del principal acontecimiento deportivo del planeta y, por tanto, menoscaba su calidad. Pero es lo que hay, el formato y el número de las plazas son las que son (12) y por tanto España buscará a partir de hoy en el Malmö Arena su billete para la cumbre de Río. Los hombres de Manolo Cadenas llevan varios días en la ciudad preparándose para su estreno de esta tarde contra Eslovenia (17.00 horas, Teledeporte) y los choques de mañana ante la cenicienta Irán (16.15 horas) y del domingo frente a la anfitriona, Suecia (16.30 horas). Solo los dos mejores conseguirán viajar a Brasil, donde doce combinados nacionales lucharán por la medalla de oro en agosto.

A pesar de ser cuatro, solo tres selecciones pelearán de verdad por la clasificación. Irán es un invitado a la fiesta que poco o nada tiene que hacer ante bloques tan potentes como el español, el esloveno y el sueco. Los 'Hispanos' están comprometidos con el objetivo de Río y están decididos a imponer su jerarquía en un escenario en el que Suecia contará con el apoyo de hasta 13.000 aficionados, que llenarán hasta la bandera el Malmö Arena. De momento, habrá que aparcar el duelo con el anfitrión y pensar en el encuentro de hoy, en Eslovenia, un equipo que cuenta con dos de los mejores centrales del mundo, Uros Zorman y Dean Bombac. Cadenas nunca ha escondido su admiración por el balonmano esloveno y llegó a compararlo con el que practican sus hombres. «Plantean multitud de variables defensivas y su ataque, tanto elaborado como directo, es potente a pesar de carecer de grandes lanzadores. En ocasiones sentenció se asemeja a nuestra tipología de juego».

España cuenta con una baja muy importante y lleva el nombre de Arpad Sterbik. El portero, un seguro de vida, no podrá estar en Suecia por un problema en la espalda y las rodillas y la responsabilidad de 'bajar la persiana' de los 'Hispanos' recaerá principalmente en Gonzalo Pérez de Vargas (Barcelona), escoltado por el joven Rodrigo Corrales (Wisla). Había dudas también sobre la presencia de Víctor Tomás, que abandonó la concentración por su inminente paternidad, pero las últimas informaciones indican que el extremo del Barça se reincorporaría al grupo y llegaría a tiempo para disputar el preolímpico. Hasta el más mínimo detalle importa cuando está en juego una plaza olímpica, que se venderá muy caro en la pista sueca.

Dinero

¿Y por qué España tiene que jugarse los cinco aros en Suecia? Simplemente por una cuestión económica. La Federación del país nórdico puso mucho dinero sobre la mesa para acoger el evento y se le adjudicó la organización. Tanto los jugadores como el cuerpo técnico califican de «trascendental» el duelo de hoy contra Eslovenia porque una victoría supondría poner pie y medio en Río, siempre y cuando se imponga la lógica en el resto de los enfrentamientos. En cambio, perder ante los hombres entrenados por Veselin Vujovic sería un durísimo revés que, en cualquier caso, no contemplan los 'Hispanos'. Su mentalidad ganadora les hace inmunes al pesimismo y están convencidos de que abrirán el torneo dando un puñetazo encima de la mesa, la mejor manera de comenzar y de asustar.

Si todo va bien hoy, habrá que estar muy atentos al partido de mañana entre Suecia y Eslovenia porque en caso de victoria de los locales, y que España haga los deberes frente a Irán, eso significaría que los 'Hispanos' y los nórdicos estarían clasificados incluso antes de enfrentarse entre sí el domingo. Pero no convendría entretenerse con la calculadora porque los eslovenos exigirán muchísimo y la respuesta de la selección deberá ser contundente. La subcampeona de Europa no puede fallar si quiere estar en Río, donde ya tienen asegurada su presencia Brasil, Argentina, Francia, Egipto, Catar y Alemania. Que el balonmano reparta suerte.