Cae el 'Mourinho' del ciclismo británico
Shane Sutton, el duro preparador de Wiggins y la pista británica, dimite acusado de discriminar a mujeres y discapacitados
J. Gómez Peña
Jueves, 28 de abril 2016, 01:08
Cuando era ciclista de velódromo, Shane Sutton tenía fama de «borrachín y pendenciero». Un australiano bruto de Nueva Gales del Sur. Un boxeador en bicicleta. Cuentan que al ver tras una carrera cómo uno de sus compañeros se enzarbaba con un rival, Sutton se acercó a la trifulca y sin mediar palabra tumbó de un puñetazo al ciclista que discutía con su amigo. Le daba igual quién tuviera razón. Defiende a los suyos sin preguntar.
Sutton, que aprendió a sobrevivir en el desierto australiano chupando la humedad escondida bajo las rocas, se hizo luego entrenador. Duro. Él y Dave Brailsford, hoy mánager del equipo Sky, resucitaron el ciclismo de pista británico, el de Wiggins y Cavendish. Wiggins, que es la obra cumbre de Sutton, le definió un día como el 'Mourinho' del velódromo. Le adora: «Shane es uno de esos tipos que te gustaría tener al lado en una trinchera». Un 'Sargento de hierro', como el título de la película de Clint Eastwood. Igual de estricto y malhablado.
Y por eso, por estar acusado de usar expresiones machistas y discriminatorias contra los discapacitados ha tenido que dimitir como director técnico del ciclismo británico a menos de cien días de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
La corredora Jessica Varnish le acusa de ser un machista. Según la deportista, Sutton le dijo que «se dedicara a otra cosa y que tuviera un bebé». Otras ciclistas, como las medallistas Victoria Pendleton «viví una experiencia similar» y Nicole Cooke, apoyaron a su compañera. La doble medallista olímpica Laura Trott, en cambio, salió en defensa de Sutton. «La relación con él siempre ha sido positiva y sana».
A la polémica por el carácter de Sutton, que tiene 58 años, se unió luego la acusación de un ciclista paralímpico. Darren Kenny asegura que Sutton les llamaba «cojos» y «tullidos». Según fuentes consultadas por el 'Daily Mail', el entrenador usaba esos términos en un tono de broma. Kenny no lo sintió así.
Nada más conocerse estos testimonios, la Federación británica abrió una investigación. Sutton, que sucedió a Brailsford como director técnico en 2014, es uno de los responsables de que la pista británica mande hoy en los velódromos mundiales. El preparador negó haber insultado a sus corredores. «Rechazo las acusaciones. Todo esto es una distracción en la preparación para los Juegos, así que he decidido dejar mi puesto», reaccionó el 'Mourinho' galés, que se aparta para no enturbiar el ambiente en la selección a las puertas de los Juegos de Río.