Ibarrangelu ganará en seguridad con la ampliación del vial a Akorda

Ibarrangelu renovará este año la carretera y el centro neurálgico de Akorda, un barrio situado en un entorno rural que durante la temporada estival aumenta vertiginosamente el número de habitantes y visitantes. El acceso rodado es una de sus prioridades debido a la falta de seguridad. Por ello, la Diputación ha redactado, a petición del Consistorio, el proyecto de adecuación del vial de 2,5 kilómetros entre Ibarrangelu y el barrio. La calzada, muy sinuosa y estrecha, resulta muy peligrosa sobre todo en verano cuando el tráfico aumenta de forma notable.

«Este entorno es muy visitado porque da acceso a itinerarios paisajísticos, al conocido monte de San Pedro Atxarre desde donde se divisa Urdaibai y a varios negocios hosteleros», explicó el alcalde, Jesús Mari Ziluaga. Algunos tramos apenas superan los cuatro metros de anchura por lo que dificulta el paso de dos vehículos simultáneamente. «No reúne unas condiciones mínimas de seguridad y es muy peligroso para peatones y ciclistas por falta de visibilidad. Se han registrado cinco accidentes, tres frontales o laterales y el resto por salida de calzada», revela un informe municipal.

Supresión de las curvas

El plan previsto para este año persigue ampliar la carretera en los tramos más estrechos, rellenar la cuneta con hormigón y habilitar seis apartaderos cada trescientos metros con una longitud de 15 metros y anchura de 2,5 metros cada uno para que se puedan cruzar dos turismos en sentido contrario. «La solución ideal consistiría en aumentar el ancho en todo el vial pero la orografía y los taludes obligarían a construir muros de contención, así como obras importantes en drenaje», recoge el plan. El presupuesto de los trabajos superará los 235.000 euros y el plazo de ejecución rondará los seis meses. «Adjudicarán los trabajos de un momento a otro y seguido iniciarán las obras», anunció Ziluaga.

El proyecto aprobado por la Diputación fue mostrado en el último pleno celebrado por primera vez en la 'Herriko taberna' de Akorda. Los residentes propusieron que en un futuro la Diputación elimine las curvas. «Se quejaron porque pensaban que la institución foral iba a diseñar un proyecto más ambicioso y desde el Consistorio trasladaremos estas peticiones para que se tengan en cuenta y, más adelante, puedan afrontarse», adelantó el primer edil.

El Consistorio también procederá este año a mejorar el entorno del centro neurálgico de Akorda. Los residentes plantearon una urgente reforma de la plaza debido a que la acera se encuentra bastante deteriorada. Además de sustituir los árboles, que están enfermos, por ejemplares autóctonos, la actuación incluirá la instalación de un par de puntos de luz y la adopción de medidas seguridad. «Para que los vehículos no invadan el espacio donde juegan los niños idearemos un sistema, bien con un vallado o pivotes», añadió. La mejora supondrá un desembolso de 40.000 euros.