La depuradora de Munitibar evitará malos olores en su puesta en marcha en verano
La semana que viene comenzarán las pruebas eléctricas de la nueva planta de fecales que ha exigido una inversión de 2,4 millones de euros
MIRARI ARTIME
MUNITIBAR.
Miércoles, 23 de octubre 2019
La nueva depuradora de aguas fecales de Munitibar incluirá un sistema de desodorización para evitar malos olores cuando comience a funcionar a pleno rendimiento el próximo verano. «La depuradora, al igual que el bombeo, a parte de contar con equipos técnicos para el tratamiento de las aguas, dispone de un sistema que, al encontrarse cubierto y tener un doble nivel de confinamiento en sus puntos principales, evitará olores y molestias», tal y como recoge el proyecto aprobado por el Consorcio de Aguas Bilbao Bizkaia.
De momento, las obras que la entidad consorciada adjudicó a la unión temporal de empresas formada por Ferrovial/Cadagua por un total de 2,4 millones de euros y que serán financiados con fondos provenientes de la Diputación, se prolongarán hasta el próximo mes de febrero.
Durante ese periodo, se ejecutarán distintos tipos de comprobaciones que se iniciarán la semana que viene con las pruebas eléctricas para garantizar su correcto funcionamiento que persigue resolver los vertidos a la fosa séptica que funciona hasta el momento y que se mantendrá hasta la plena operatividad de la nueva estación.
«Hasta ahora, en el casco urbano de Munitibar se extiende una red en espina de pez constituida por un colector principal y varios ramales que recogen los vertidos de las urbanizaciones y de los edificios de viviendas existentes, finalizando en una fosa séptica que se encuentra 'totalmente colmatada'», añadieron las mismas fuentes.
Tanque de tormentas
La depuradora dará servicio al principal núcleo de la localidad, con unos 250 habitantes, así como a las zonas de Gerrika, Gerrikaitz y Totorika -otros 150 vecinos, que ya se encuentran conectados a la red de saneamiento de la estación-.
«No se precisan nuevas actuaciones para permitir los desarrollos futuros previstos de un centenar de nuevos habitantes. Por ello, los caudales medios de tratamiento varían entre los 128,74 metros cúbicos al día actuales a los 163,30 futuros», detallaron desde el Consorcio.
La red de colectores se compone de un tramo general en gravedad y tres ramales de conexión para la incorporación de la residencia, el caserío Uribai y Rementeria. «El colector general conecta el de la red municipal hasta la estación de bombeo de aguas residuales (EBAR)», añadieron.
Los primeros 400 metros «se realizarán mediante un sistema conocido como perforación horizontal dirigido para atravesar el bosque existente y evitar daños medioambientales al mismo». También contará con un tanque de tormentas.