Aranzadi halla restos de una decena de víctimas del franquismo en el cementerio de Orduña
Fueron localizados ayer en la primera jornada de exhumaciones que lidera la Sociedad Aranzadi y que se extenderán hasta el domingo
Los restos mortales de al menos una decena de personas, víctimas del franquismo, fueron localizados ayer bajo el suelo del cementerio de Orduña, en la primera jornada de exhumaciones que lidera la Sociedad Aranzadi, y que se extenderán hasta el domingo. El hallazgo confirma las previsiones que manejaba la asociación, como explica el médico forense Francisco Etxeberria. «En 2014 localizamos en este mismo lugar catorce cuerpos de personas que habían pasado por la prisión de Orduña, por lo que sospechábamos que habría más».
Poco después de las diez de la mañana, el ruido de excavadoras, azadas y palas llenó el camposanto. Más de una veintena de voluntarios de Aranzadi se pusieron manos a la obra para recuperar los restos de fallecidos entre los años 1937 y 1941. La búsqueda se centra en un espacio donde nunca se había levantado el suelo, pero los indicios que arrojaron las excavaciones realizadas junto a ese lugar en 2014 resultaron ciertos, y en cuestión de horas asomaron los primeros restos.
La alcaldesa de Orduña, Itziar Biguri, junto a vecinos de la localidad, acompañó a los voluntarios y colaboró cargando cubos de tierra para despejar la zona. Rosa María Zurbitu es una de las residentes que se acercó al cementerio para echar un cable a los de Aranzadi. El tema le toca de cerca, porque «tengo un abuelo que falleció en combate y debe estar en Begoña, probablemente en la fosa común, aunque no le han encontrado todavía», contaba emocionada. La mujer considera que tanto las acciones llevadas a cabo en el camposanto de la capital vizcaína como en Orduña «sirven para que los familiares podamos pasar página, aunque hay quienes creen que todo esto es remover las cosas, pero para mí es llegar a un punto en el que sabes dónde está tu gente», asegura.
Los cuerpos estaban dentro de cajas de madera que con la ampliación del cementerio fueron sepultadas bajo cemento
Mariela Villavicencio acompañaba a su hija June que quiere estudiar Medicina forense. «Se puso en contacto con Francisco Etxeberria y aquí está para ayudar y verlo de cerca», afirma. Se desplazaron desde Irratia para participar en las tareas de exhumación.
Muchos más kilómetros separan a Ekiñe Mancha de su hogar. Esta joven de 24 años está cursando su último curso de Arqueología en Granada, aunque es orduñesa. «Me enteré de que se iba a hacer una intervención en el cementerio, hablé con Etxeberria y le dije que me interesaba formar parte. Siendo de Orduña, qué menos que venir hoy aquí». Por eso aprovechó el puente para regresar a casa y formar parte del grupo de Aranzadi.
La manera en la que se han encontrado estos nuevos restos, «sigue un poco la línea de lo que esperábamos, se trata de ataúdes colocados en fila», explica Lourdes Errasti, otra de las responsables a cargo de la exhumación. Para localizarlos ha sido necesario «levantar la capa de cemento de la ampliación del cementerio y cavar medio metro de profundidad», apunta Etxeberria.
