Borrar

Hazlo fácil

Don Xabier siempre aportaba un matiz que estaba presente pero era invisible para el resto, ese punto de vista que solo lo tiene quien pone pasión en lo que hace

Viernes, 4 de julio 2025, 17:30

Entré de manera sigilosa, con toda mi adolescente atención puesta en no hacer ni gota de ruido. La pequeña puerta a la izquierda, pasando el ... cuarto del bedel, que daba acceso al entonces templo del baloncesto alavés del Pabellón de Landázuri, apenas estaba abierta para el primer entrenamiento de aquel ilusionante Caja de Álava 1984-85, que lo iba a dirigir Xabier Añua. Poco antes me dijeron: «tienes que ir a verle entrenar». Que se transformó más que una recomendación en una inocente obligación: «tengo que ir a verle entrenar».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcorreo Hazlo fácil

Hazlo fácil