El uno a uno del Athletic-Espanyol: De Marcos, el mejor

Un mero espectador más en la gélida noche de San Mamés. No tuvo que intervenir porque el Espanyol apenas se asomó por su área.

Gran partido del lateral de Laguardia, que fue un puñal por la banda derecha del Athletic. Después de que en el Reale Arena fallara en el primer gol, ante el Espanyol se resarció siendo el mejor rojiblanco sobre el césped y con el añadido de marcar el gol de la victoria y la ciasificación.

Partido muy plácido para el central de Cruces, que apenas tuvo que sufrir porque Joselu, el único futbolista adelantado del Espanyol, fue una isla, sobre todo en la primera parte. En su debe, un codazo a un rival al filo del descanso donde se jugó la expulsión en una jugada sin peligro.

Al igual que Yeray, tuvo una noche muy plácida. En la primera parte buscó ayudar a sus compañeros adelantando líneas y en la segunda, con el equipo más retrasado, estuvo siempre atento.

Como en los últimos encuentros, un poco de todo, aunque se le ve mejor a nivel físico y eso le permite ser más contundente en defensa a la hora de cerrar su banda. Trató de proyectarse en ataque, pero no estuvo acertado.

Se ha convertido en un futbolista indispensable para Ernesto Valverde en el centro del campo del Athletic. Frente al Espanyol, la novedad estuvo en que actuó como único pivote, ya que Zarraga estuvo más adelantado. No se complicó y se limitó a buscar siempre al compañero más cercano y mejor colocado.

Uno de sus mejores partidos en el primer equipo. Su presencia fue muy beneficiosa para el juego de ataque del Athletic, ya que estuvo participativo, protagonista y generó buenas opciones para sus compañeros. Inició la jugada del gol y se entendió muy bien con Sancet.

Buen partido del navarro, uno de los más participativos en el ataque rojiblanco, en especial en la primera parte. En la segunda, con el equipo a menos revoluciones, le costó más entrar en juego, aunque tuvo la ocasión más clara del Athletic con un remate forzado que detuvo el portero.

Valverde está confiando en el delantero donostiarra, pero frente al Espanyol apenas tuvo ocasiones para marcar. Muy vigilado por los centrales, hubo momentos en los que cambió su posición con Nico Williams y cayó a la banda derecha, pero tampoco brilló en esa zona.

Regresó al once después de que Valverde apostara por los hermanos Williams en el derbi, y desde la banda izquierda trató de hacer daño al Espanyol. No se escondió y estuvo participativo, pero en su debe hay que poner su escaso acierto en los lanzamientos desde la esquina.

Mejor en la primera parte, donde el intenso ritmo de partido que propuso el Athletic y la presión alta favorecieron su participación en el juego. Aun así, volvió a tener escaso acierto en el uno a uno, siempre bien vigilado por la defensa rival.

Necesitaba el centrocampista de Getxo un encuentro como el de anoche. Volvió a la titularidad en una posición más adelantada y el Athletic agradeció su intensidad y su visión de juego.

Después de ser protagonista en la primera parte de la temporada, con cinco goles, y en los amistosos tras el parón mundialista, Guruzeta no ha logrado recuperar esa efectividad.