El Athletic siempre tiene a Aduriz

Da igual que los partidos estén de cara o se compliquen. El Athletic siempre tiene a Aritz Aduriz para resolverlos. El delantero vive a sus 34 años el mejor momento de su vida deportiva y marca a pares para impulsar al equipo rojiblanco. Lo hizo frente al Getafe y cuatro días después, ha repetido para desatascar a un Athletic que era incapaz de meter mano a un Augsburgo muy sólido y con el marcador a favor desde el minuto 14. Pero el veterano ariete, con dos apariciones estelares, ha devuelto el pulso y el color a su equipo y lo ha impulsado hacia su primera victoria en esta fase de grupos de la Liga Europa, que ha redondeado Markel Susaeta en el minuto 89 con un gol que ha premiado su esfuerzo y su pelea. Dos 3-1 consecutivos -en Liga y en Europa- que colocan al Athletic en el buen camino.

Como era de esperar, Ernesto Valverde ha realizado cambios pensando en el intenso calendario que le espera al Athletic en las próximas fechas. Respecto al duelo frente al Getafe, Herrerín, Laporte, Elustondo e Ibai Gómez entraron en el once en lugar de Iraizoz, Gurpegui, San José y Aketxe, pero en cambio ha mantenido a piezas fundamentales en este Athletic como son Beñat, Raúl García o Aduriz. Pese a su intento por dar frescura, pronto se vio que el Augsburgo era un rival más fuerte de lo previsto, al menos de lo que pensaban los aficionados que han acudido esta noche a San Mamés. Porque salvo una clarísima ocasión de Aduriz tras un centro de De Marcos, el Athletic apenas ha inquietado en los primeros 45 minutos a Hitz, mientras Herrerín ha tenido trabajo de sobra.

Pese a que el inicio en la Bundesliga no ha sido el esperado para un club que el pasado año fue la revelación -un sólo punto tras cuatro encuentros-, y que afrontaba esta noche su estreno continental, lo cierto es que el Augsburgo ha estado cómodo sobre el césped de La Catedral. Ordenado, con las ideas muy claras y apoyados en una condición física excelente, los de Markus Weinzierl pronto han encontrado el camino para inquietar al Athletic. De hecho, han tardado poco en poner el encuentro a su favor, cuando una jugada plagada de errores y tropiezos ha finalizado con el remate de Altintop para colocar el 0-1 (M.14).

Lo cierto es que el gol ha tenido efectos beneficiosos para los bávaros, cada vez más confiados, y apenas ha tenido incidencia en el juego del Athletic, completamente plano en todo el primer periodo. Salvo Beñat, que ha tratado de estar en todas partes del centro del campo y las subidas de De Marcos por la banda derecha, los rojiblancos han ofrecido muy pocas noticias positivas. Con demasiada insistencia a la hora de buscar el fútbol directo para atacar la defensa del Augsburgo, los alemanas apenas han tenido problemas para controlar el partido y llevar ellos el ritmo de juego y sumar ocasiones. Porque Kohr y Ji han tenido el segundo, pero Herrerín ha estado providencial en sus intervenciones y ha mantenido al Athletic con vida. Incluso Raúl García ha tenido el empate en el descuento tras dejada de Aduriz, pero hubiera sido demasiado premio para el preocupante rendimiento del equipo en esos 45 minutos.

La primera medida de Valverde tras el descanso ha sido dar entrada a Mikel Rico en lugar de Elustondo. Reforzar el centro del campo para presionar más arriba y contrarrestar la fortaleza alemana se antojaba fundamental para buscar la remontada. Y aunque el Athletic ha salido más puesto, nada hacía presagiar un cambio de decoración inmediato. Pero claro, los rojiblancos tienen a uno de los mejores delanteros del fútbol nacional. Un Aduriz que a pesar de estar cerca de los 35 años, marca goles tan espectaculares como el del empate (m.55). Un desmarque y una ejecución de cabeza impecables, que ha abierto el camino de la remontada cuando la puerta parecía infranqueable.

El Augsburgo ha encajado bien el golpe. De hecho, ha seguido a lo suyo y casi siempre por su banda derecha, donde Lekue ha sufrido en exceso con el alemán Esswein. Pero también Herrerín ha seguido a lo suyo, es decir, amargando la noche a los delanteros del club bávaro, que han acabado padeciendo la diferencia de pegada entre ambos equipos. Porque como hemos recordado antes, el Athletic tiene a Aduriz. Y cada aparición suya vale su peso en oro. Diez minutos después de lograr el empate, ha culminado con un zapatazo una jugada a trompicones de Susaeta que suponía la remontada. Dos goles del donostiarra, 2-1 y el Augsburgo contra las cuerdas por una volterera inesperada según había discurrido hasta entonces el partido.

De ahí al final, los de Valverde han defendido con criterio y han redondeado el marcador gracias a Susaeta para abrir la fase de grupos con un triunfo fundamental, ya que los dos siguientes encuentros el Athletic los afrontará lejos de San Mamés, en los campos del AZ Alkmaar y Partizán. Una empresa compleja, aunque con un delantero como Aduriz, las cosas siempre se ven de otra manera.