Sindicatos pedirán la nulidad de los despidos en Aernnova

Que el expediente de regulación de empleo aplicado por la dirección de Aernnova en la planta de Berantevilla y cerrado de manera definitiva el pasado 31 de diciembre con 55 despidos iba a terminar en el juzgado era algo previsto prácticamente desde que se presentó el ERE en noviembre. Las discrepancias entre empresa y comité han sido evidentes durante la negociación y los sindicatos se mantienen firmes en su postura de que «no había causas justificadas» para decretar esos despidos, que serán efectivos el 1 de febrero.

ELA ya ha anunciado públicamente que denunciará el ERE en sede judicial y solicitará la nulidad de los despidos mientras que LAB también seguirá el mismo camino pero por el momento se mantiene a la espera de la decisión de la Inspección de Trabajo. Aunque la central abertzale teme que falle a favor de la empresa, «con lo que la batalla no habrá terminado y habrá que ir a la siguiente instancia», el juzgado, según portavoces LAB. Por el momento no hay un posicionamiento conjunto del comité.

Mientras tanto prosiguen las movilizaciones y este lunes ha tenido lugar el primer día de huelga en la planta, que según representantes de los trabajadores contó un seguimiento «absoluto, del 100% de la plantilla. Solo han entrado a la fábrica los coches de algunos miembros de la dirección». La Ertzaintza acudió con diferentes dotaciones policiales para evitar cualquier posible incidente.

Estos paros proseguirán hasta final de mes con dos días más de huelga la próxima semana y tres en las dos siguientes, hasta un total de nueve. Tanto en la protesta a la entrada de la planta en Berantevilla como en la posterior movilización en Vitoria, que arrancó frente a la sede del Gobierno vasco en Lakua y acabó con una concentración ante el Palacio foral, los trabajadores de Aernnova portaron 'ataúdes' de plástico para escenificar los despidos. Llevaron 82 aunque finalmente el ERE se cerró con 55 salidas traumáticas y 27 bajas voluntarias entre prejubilaciones y salidas incentivadas.

El comité, aseguró su presidente Juan Carlos Gómez (ELA), ha vuelto a solicitar una reunión con la viceconsejería de Industria del Gobierno vasco «después de que la que teníamos prevista para el pasado lunes nos la suspendieran». El dirigente sindical volvió a reclamar al Ejecutivo de Lakua que «no se ponga siempre del lado de la empresa defendiendo sus intereses cuando hay familias que se han quedado sin trabajo. Porque sigue habiendo alternativas a los despidos».