Rioja Alavesa se prepara para un futuro con arquitectos de renombre
Las bodegas y nuevos centros del vino se multiplican en una comarca que ya ve en el enoturismo una de sus grandes fortalezas
Rioja Alavesa madura, como sus mejores caldos, una renovación que comprende bodegas de toda la comarca desde Samaniego hasta Oion pasando por Laguardia. La cuna ... del buen vino alavés se prepara para un futuro marcado por la arquitectura de vanguardia, con firmas de renombre, pero sin dejar de lado el arraigo a la tierra. Esa es la estrategia por la que están apostando las empresas para su futuro: uno en el que no sólo vende el vino, también los edificios que albergan el preciado líquido.
30 millones
están comprometidos solo para financiar los proyectos de Faustino y Juan Gil
En apenas unos años cuatro grandes proyectos se han alzado en la comarca. Si a principios de siglo fueron Gehry, Aspiazu, Calatrava o Mézieres quienes dieron identidad propia a Ysios, Baigorri, Viña Real y Márques de Riscal, ahora otras firmas recurren a los grandes arquitectos para definir sus nuevas bodegas.
De entre todas las iniciativas, la que más destaca, de largo, es la de Faustino. Familia Martínez Zabala confió hace un año en Norman Foster para levantar 'El legado de Bodegas Faustino'. El proyecto, que supone una inversión de 15 millones para el grupo, ya tiene avanzadas las obras y, si nada se tuerce, estará listo para la vendimia del próximo otoño. Portavoces del grupo vinícola han confirmado a EL CORREO que el proyecto en Oion marcha viento en popa, sin contratiempos ni en lo temporal ni en lo económico. Aunque aún no se ha decidido a cuánta gente se contratará, se intuye que hará falta recurrir a más plantilla con esta ampliación. El nuevo espacio dedicará un edificio -el que ilustra esta información- a los visitantes como núcleo central. Este bloque contará con una estructura ligera hecha de madera procedente de bosques locales, un amplio techo de vidrio y abovedado, así como placas solares para hacer de 'El legado de Bodegas Faustino' un proyecto sostenible.
Cerca, en Laguardia, se fragua otro vistoso plan. En la cabecera de la comarca, el grupo murciano Juan Gil tiene presupuestado lo mismo que Faustino: 15 millones con los que ampliar las instalaciones de Rosario Vera, su marca dentro de la DOCa Rioja. El proyecto, adelantado en su momento por este periódico, busca hacer un edificio icónico de dos plantas.
Para ello no ha apostado por un 'Pritzker' como Foster, pero sí ha contado con uno de los mejores arquitectos del panorama nacional: el también murciano Manuel Clavel. Suyos son edificios como MIX, el restaurante que Alain Ducasse, el chef con más estrellas Michelin del mundo, tiene en Dubai. Clavel, que da clases en varias universidades estadounidenses, también ha hecho el Museum Garage de Louis Vuitton en Miami y es el artífice de la piscina en voladizo más grande de Europa, ubicada en el restaurante Odiseo de Murcia.
Su proyecto en Rioja Alavesa aún no tiene fecha, pero sigue avanzando: en los últimos meses Juan Gil ha cerrado la compra del solar donde se ubicará la ampliación de Rosario Vera y espera a los informes necesarios para que la iniciativa se haga realidad.
La sede del campus del vino saldrá de un concurso internacional de arquitectos
Una fachada en pendiente
Más hacia el oeste, en Samaniego, Remírez de Ganuza prepara otra ampliación. En su caso, la necesidad de ganar espacio ha empujado a la bodega de la familia Urtasun a buscar más terreno fuera de la plaza de la iglesia del pueblo. Para ello se ha diseñado una ampliación con tres plantas, con una fachada en pendiente, en un espacio de 12.000 metros cuadrados. «Queremos hacer un espacio que sea bonito y lo más atractivo posible», afirmaba hace unos días José Ramón Urtasun en conversación con este periódico.
Para la renovación, que podría estar lista en 2027, Remírez de Ganuza ha confiado en el estudio Mecanismo Arquitectura. La empresa también cuenta con un historial de prestigio. Su firma está en el hotel Akelarre de San Sebastián, un lujoso cinco estrellas ubicado en las faldas del monte Igeldo y en la ampliación del restaurante de Martín Berasategui, en Lasarte-Oria y con tres estrellas Michelin, que también es obra del estudio con sede en Madrid.
En una fase algo más rezagada está el proyecto de Alma Carraovejas en Leza. El grupo vallisoletano lanzó en 2020 Aiurri, su marca de Rioja Alavesa, pero aún no sabe a qué dedicar el palacete del siglo XVI que adquirieron en pleno corazón de la comarca. Se restaurará, pero todavía no se ha decidido nada sobre su uso.
En los últimos meses ha tomado fuerza la idea de destinar parte del edificio a crear una «residencia cultural» de la mano de la Fundación Cultura Líquida, la rama social del grupo vinícola. Si se opta por esta opción, parte del edificio se dedicará a «facilitar intercambios culturales y científicos vinculados al vino».
A todas estas iniciativas hay que sumar la sede del campus del vino en Rioja Alavesa (EDA), que será vecina de la Casa del Vino, en Laguardia y para la que está en marcha un concurso de arquitectos.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión