La nueva ampliación del Teatro Principal

El Gabinete Urtaran, según ha podido saber EL CORREO, negocia con Urteim la compra de este espacio de 470 metros cuadrados, 310 en planta baja y 160 en el sótano. Fue hace dos años cuando la promotora del empresario Juan María Uriarte adquirió este local a una familia asentada en Madrid y que en su día albergó la Pastelería Alberdi. Su situación es estratégica y le separa un tabique del muelle de carga del Teatro.

El Consistorio podría destinar esta superficie para las oficinas técnicas del Principal y así liberar un buen número de metros cuadrados para que pudiesen ser dedicados a otras cuestiones culturales en el complejo escénico. Las intenciones del equipo de gobierno municipal son licitar el nuevo proyecto para el recinto el próximo mes de mayo con el fin de que las obras puedan arrancar en esta legislatura, es decir antes de mayo de 2023.

Y apuesta por una propuesta de reforma que respete los valores estructurales y arquitectónicos del edificio, e impulsar una rehabilitación ajustada a las recomendaciones técnicas. El proyecto debe proteger y convertir el Principal «en un teatro del siglo XXI», según un informe foral desvelado por este periódico y que enterraba la ampliación con el edificio Ópera por que el valor histórico del recinto de San Prudencio impide tocar su estructura. Cualquier reforma ha de reunir «las condiciones de accesibilidad y seguridad pertinentes con la conservación del patrimonio como prioridad», añade el texto.