Armas blancas en Euskadi

Dos bandas se enfrentan a navajazos en el Casco Viejo de Vitoria por controlar la venta de droga

«Se encuentran en la plaza. Se empiezan a gritar, a insultar y ahí empiezan a atizarse. Menos mal que la policía viene pronto. Pero esto es insoportable», se quejan dos residentes consultadas por este periódico. El miércoles y el jueves hubo encontronazos entre lo que parecen ser dos grupos dedicados a vender droga y que pugnan por «hacerse con la zona».

«Hay un par de jóvenes que llevan pocos días en el barrio y que presuntamente viven del menudeo de sustancias estupefacientes», deslizan medios policiales. Este dúo ha chocado con otro grupo ya asentado en la ladera oeste de la almendra medieval, lo que se ha traducido en desencuentros violentos. «El miércoles empezaron. A uno le pusieron fino. Sus compañeros arrancaron una papelera y se la tiraron a sus agresores. Esto se llenó de coches patrulla y el tema se arregló», reflejan vecinos.

La tarde del jueves volvió la gresca con los mismos protagonistas. Aunque fue el viernes la jornada de mayor gravedad. Sobre las seis de la tarde se repitió un nuevo conato de pelea multitudinaria, riña tumultuaria en el Código Penal. Uno de los implicados, de 28 años, se refugió en su casa y salió «con un machete». Lo exhibió y amenazó con usarlo.

Entremedias, esa misma persona sacó un 'spray' de gas pimienta y lo usó. «A esa hora había mucha gente en la plaza que huyeron despavoridos. Más de uno apenas podía ver por el gas». También lo utilizó cuando los agentes les dieron el alto.

El varón del machete, que fue detenido por la Guardia urbana, presentaba «dos navajazos muy recientes». Se cree que se los causaron miembros del grupo rival. Fue puesto a disposición judicial acusado de «atentado a agentes de la autoridad, resistencia y desobediencia grave y riña tumultuaria». Por cierto, el arma blanca le fue localizada -y requisada- en su ropa interior.

Pocos minutos después, en el cercano parque del Norte fueron interceptados un varón y una mujer sospechosos de cometer un delito de «riña tumultuaria».

Semejante grado de violencia ha causado enorme preocupación en este área de la capital del País Vasco. «Pedimos al Ayuntamiento de Vitoria y a su alcaldesa, Maider Etxebarria, que nos protejan antes de que haya que lamentar desgracias», solicitan residentes.