Los barrios del BEI piden pasos peatonales seguros
Las asociaciones de vecinos critican que tenga prioridad sobre los peatones y que carezca de pasos de cebra. Reclaman reforzar la señalización
Las obras del bus eléctrico han abierto una cicatriz para el escalafón más débil de la pirámide de movilidad, es decir, el peatón, en muchos ... de los barrios que atraviesa. Esa es la impresión que trasladan a EL CORREO los representantes vecinales de los distritos por los que discurre esta línea de Tuvisa (actualmente la Periférica), quienes reclaman al Ayuntamiento pasos «seguros» para cruzar a pie. En algunos colectivos de residentes aún no acaban de asimilar que este nuevo vehículo sin emisiones tendrá prioridad total sobre los viandantes. Así se explica que en su trazado no existen los pasos de cebra -porque el BEI no parará ante un peatón- y sin embargo sí unas señalizaciones verdes sobre los carriles con la leyenda 'Atención/Kontuz' y un dibujo del nuevo urbano junto a una línea blanca en forma de zig-zag.
Una de estas señales luce desde hace algunas semanas en Santa Lucía, en la calle Jacinto Benavente, vía que en unos meses será atravesada por los nuevos autocares eléctricos. No satisfacen al barrio. Estas indicaciones son «insuficientes», a juicio del presidente de la asociación de vecinos Errekatxiki, Juan Carlos Murua, quien considera que habría que reforzarlas con alguna otra señal, «por ejemplo alguna vertical luminosa», que resulte más visible para las personas. El problema que están sufriendo en esta arteria, la principal del distrito, afecta de lleno a su seguridad. Donde antes solo se debía mirar hacia la izquierda para ver si venían coches antes de cruzar, ahora debe hacerse a ambos lados «porque el tráfico circula en doble sentido», lo que resulta «peligrosísimo». El dirigente vecinal sigue recordando los grandes atascos que se generan en la calle (con un tránsito de 8.000 vehículos al día) tras reducirse su espacio de cuatro a dos carriles, así como los inconvenientes generados por las plazas de parking eliminadas.
El tránsito de peatones, especialmente los de más edad, en la calle Castillo de Fontecha (Ariznabarra) ha sufrido similares consecuencias tras la reforma que ha hecho hueco al BEI. Precisamente respecto a la prioridad que tendrá el BEI sobre los viandantes, la asociación de vecinos del barrio ha remitido al Ayuntamiento un escrito mostrando su disconformidad, señalando que «no puede justificarse la restricción de preferencia» y sugiriendo que esos pasos «sigan siendo como siempre». «En este barrio particularmente la media de edad es muy alta. A ver cómo asume una persona de 80 años que no tiene por dónde pasar de forma preferente. Están complicando las cosas a la ciudadanía, y pedimos que se señalice mejor. Lo primordial es la seguridad», recalca Justo Sánchez desde el colectivo. En la parte de la calzada reservada para el bus eléctrico «aún no hay pasos pintados» y existe «confusión» entre los residentes a la hora de cruzar. «Que indiquen con claridad por dónde hay que pasar», piden.
Punto negro en Cervantes
Un grupo de deportistas que cruza corriendo el Paseo de Cervantes en la intersección con Salvatierrabide, camino a Armentia, aprieta el paso ante la llegada de un bus urbano, que tras las remodelaciones por el BEI ahora circula por un vial sin paso de cebra. Los coches que ruedan en paralelo sí se deben detener en el correspondiente paso de peatones señalizado. Este cruce, donde una ancha calzada ha pasado a sustituir a la pequeña glorieta resaltada que había previamente, es un punto con «constante trasiego de paseantes, deportistas, usuarios de instalaciones deportivas... que el BEI tenga prioridad ahí es una barbaridad, me pone la piel de gallina», confiesa Pedro Vicarregui, portavoz de la asociación vecinal Gure Batan. «La prioridad en pleno paseo hacia Armentia debería ser del peatón, pero con este transporte se prioriza el tráfico, me da igual que sea eléctrico».
El representante reitera que la circulación está «tomando» Salvatierrabide, por la que pasan a diario unos 160 autobuses interurbanos «rozando a los viandantes» y donde la obra del BEI ha dejado aceras que carecen de la anchura mínima (se reduce a 2 metros justos, en el límite, e impide colocar mobiliario urbano). La arteria está levantada entera y por ahora «desconocen» dónde van a estar exactamente los pasos para cruzar a pie. «Queremos aceras amplias y carriles bici en la zona, es nuestra demanda prioritaria», recuerdan.
Al noroeste de Vitoria, en el trayecto del autobús eléctrico a su paso por Bulevar de Euskal Herria -a la altura del HUA-, quienes atraviesan caminando un paso de cebra de la zona cercano a Duque de Wellington se encuentran con que las rayas blancas solo están pintadas sobre los carriles por los que pasan los coches, pero no en el tercer carril de la calzada (el del BEI), algo «desconcertante». «Hemos reclamado información desde que comenzaron las obras, pero no sabemos exactamente lo que van a hacer», se queja Jon Ander Resa desde la agrupación Etxegorri de Txagorritxu. «Queremos pasos seguros», pide, mientras reitera la molestia generada por la supresión de huecos para estacionar y advierte que el punto negro de América Latina «empeorará con el BEI».
El asfaltado avanzará en breve por la Zumaquera
Las máquinas continúan abriendo paso al Bus Eléctrico Inteligente a lo largo del 'anillo' por el que discurre su trazado, el correspondiente a la actual línea periférica de Tuvisa. Una de las áreas en las que entrarán próximamente será el paseo de la Zumaquera, en Adurza, donde se renovará el firme. Será «tras Semana Santa, según nos ha comunicado el Ayuntamiento», trasladan los vecinos, que lamentan que solo se remodelará el asfalto «y no las aceras, que tienen 50 años». «Ya lo reclamamos al Consistorio», apunta José Ángel Lekuona (Adurtzakoak).
Por su parte, prosiguen los trabajos a la altura de la calle Pedro de Asúa, que reducirá los carriles para coches y dejará dos exclusivos para este nuevo urbano 100% eléctrico. El vallado de los trabajos también es visible en el tramo siguiente, en el entorno de Beato Tomás de Zumárraga junto al Seminario. Un poco más atrás, en Ariznabarra, el cruce de la calle Castillo de Fontecha con Etxezarra ha incorporado franjas de color amarillo pintadas sobre la calzada -no pueden invadirse cuando pasan los urbanos-, lo que ha generado cierta «confusión» entre los conductores. Por su parte, desde la asociación del barrio reclaman al Ayuntamiento que solucione diversos problemas surgidos en el tráfico.
«En Castillo de Fontecha con Castillo de Ocio, los vehículos procedentes de Castillo de Lantarón tienen un Stop para incorporarse a todas las direcciones, pero «no es suficiente» y por eso reclaman que se coloque un semáforo en ese cruce «urgentemente». Asimismo piden colocar una línea de detención para vehículos en el citado cruce (Fontecha/Ocio) en sentido Portal de Castilla dado que «al cierre del semáforo, el tráfico para unos metros más adelante, impidiendo el paso de los que acceden a Castillo de Ocio.
Mientras tanto, el Ayuntamiento tramita el procedimiento de municipalización para que Tuvisa asuma la gestión del BEI. Para ello se creará una comisión -en la sesión de Movilidad de hoy- donde se abordarán todos los aspectos relativos al nuevo transporte. Se prevé que se prolongue varios meses y deberá aprobarse en pleno.
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