La asociación Contra el Cáncer atendió a 1.100 alaveses en 2021, un 22,4% más

Este contratiempo podría mantener al alza la curva de pacientes y familiares que tratan en la asociación. La radiografía del año pasado ya dibuja un incremento del 22,4% respecto al ejercicio anterior, dando respuesta a un total de 1.101 personas. Aunque esa causa efecto se confirmará en los próximos meses. «No creo que este incremento sea debido al atraso de diagnósticos en la pandemia, pero esa subida sí que la vamos a tener. Y cuanto más tarde se diagnostique, la probabilidad de cura será menor», alertó Patxi Ormazábal, presidente de AECC en Álava, en la presentación de la memoria de 2021.

Es cierto que cada año ha ido aumentando el número de personas atendidas. Pero temen que ahora lo haga de forma anómala. En 2014, cuando asumieron la dirección, fueron apenas 278 los que llamaron a su puerta. Ocho años después, la cifra se ha disparado debido a que desde la entidad acuden directamente a cada uno de los nuevos pacientes que se diagnostican en el HUA Txagorritxu para informarles sobre la agenda que planifican para ellos. Cada vez son más los que agarran su mano. El año pasado se desarrollaron 3.517 actuaciones psicológicas y sociales. Todo por el beneficio de las personas.

Con el objetivo de que en 2030 se logre una supervivencia del 70%, esta agrupación trabaja con «intensidad» en la promoción de hábitos de vida saludable, la prevención del tabaquismo y la obesidad infantil y juvenil. «Se calcula que hasta un 50% de los casos se podrían evitar con medidas de prevención», señalan. A eso se suma el vital papel que juega la investigación científica. La asociación contra el cáncer invirtió el curso pasado 150.281 euros en este campo, «siendo la entidad privada que más dinero destina a la investigación oncológica». O lo que es lo mismo, el 18% de los ingresos fueron a parar a cuatro proyectos que estudian cómo vencer al cáncer.

«Hay más de 200 tipos de cáncer, algunos cuya supervivencia es baja o está estancada, por lo que debemos seguir dotando de fondos a la investigación», remarcó Ormazábal, quien dejará el cargo tras ocho años de incansable lucha por el tope que marcan los estatutos. Una etapa en la que agradece el «incansable» trabajo de los once profesionales y 190 voluntarios, así como a los 3.319 socios. Esas piezas hacen posible que la entidad lleve a cabo también los talleres gratuitos de iniciación a la marcha nórdica, alimentación saludable, relajación o yoga, entre otros.