Los altos precios dejan desiertos 11 contratos de alimentación para comedores de mayores

. La escalada de precios en la cesta de la compra –en lo que va de 2022 ha subido de media un 15,2% respecto a hace un año– ha provocado que 11 contratos de alimentación para comedores de mayores hayan quedado desiertos. Pero esto también afecta a recursos residenciales como pisos tutelados o viviendas comunitarias dependientes del Ayuntamiento de Vitoria. El valor total de los contratos asciende a más de dos millones de euros y son para dos años, se trata de diferentes lotes que van desde pescados frescos y refrigerados a lácteos, huevos, pastelería, conservas o precocinados no congelados. Incluso productos navideños.

«Además de por los precios, otros han quedado desiertos por diferentes motivos, como no presentar la ficha técnica, y estamos preocupados», reconoció ayer el concejal de Políticas Sociales, Personas Mayores e Infancia, Jon Armentia (PSE). Más allá de esa inquietud, el edil también quiso dejar claro que esto no va a tener consecuencias para los usuarios. «Nadie se va a quedar sin alimentos. Lo que se ha hecho es prorrogar el contrato actual y pagar las facturas que nos van llegando», explicó. Armentia insistió en que es un problema generalizado el que algunos contratos del Ayuntamiento se estén quedan desiertos por la subida de precios, y que en este caso en concreto el departamento se va a reunir con el interventor para buscar una solución. Evitó, eso sí, cifrar el sobrecoste que va a suponer a las arcas municipales. «Vamos a licitar un nuevo contrato porque tenemos obligación de ello, no se puede prorrogar el actual de manera indefinida». En este sentido, los precios tendrán que actualizarse para que las empresas consideren rentable presentarse. «Lo que ocurre es que en un escenario de incertidumbre como el actual, con subidas de hasta un 33% en muchos alimentos, las empresas ven que no les compensa», zanjó el concejal.

Vitoria cuenta en la actualidad con 13 comedores de mayores distribuidos en diferentes barrios además de otros recursos residenciales. Desde el PP, que llevó este tema a comisión, acusaron al Gabinete Urtaran de improvisar. «Que la vida sube no es de ahora, lleva tiempo ocurriendo. Ustedes sabían que esto iba a ocurrir y tenían que haber tomado medidas», censuró la concejala popular Elisabeth Ochoa de Eribe. Estos 11 contratos se suman a otros que ya habían quedado desiertos previamente como el del alumbrado, la comisaría del centro o la oficina de atención a personas mayores de La Florida.

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