La empresa que explota la cantera de Laminoria pide duplicar su extensión

La empresa Echasa ha iniciado los trámites para ampliar en 200 hectáreas la zona de explotación de la cantera de Laminoria, casi el doble de las 236 que ha excavado desde 1977 en esa área minera, que ocupa zonas montañosas ubicadas entre los montes de Vitoria y la sierra de Iturrieta, al norte de Maeztu. La firma solicita una recalificación del monte y un permiso de los pueblos propietarios del mismo para poder ampliar la explotación. Al Gobierno vasco le ha pedido una prórroga concesional de 30 años.

Laminoria es la mayor de las tres canteras de extracción de áridos a cielo abierto en Álava. Los datos de explotación más recientes indican que de su actual zona de excavación, que avanza en dirección a Azáceta, se extraen un millón y medio de toneladas de arena siliceas, de excelente calidad, cada doce meses. Su volumen de trabajo ha crecido de manera notable a partir de 2000 por el auge de la construcción y las obras públicas. Esta circunstancia ha contribuido a agotar su superficie autorizada de desmonte antes de lo previsto.

Echasa, que es una sociedad del grupo Echave, solicita ahora que, además de ampliar la zona de avance por el puerto, se le permita abrir dos frentes de desmonte nuevos. Uno de ellos, situado al sur del monte Kapildui, invade superficies incluidas dentro de la delimitación del parque natural de Izki. El otro plantea la reapertura de una zona de cantera, próxima al pueblo de Cicujano, que se cerró hace más de veinte años.

Los responsables de Echasa aseguran -en un documento que han presentado a la Diputación- ser beneficiarios desde 1977 de un permiso minero para extraer arena en una superficie de 2.553 hectáreas diseminada en varias zonas del «cuadrante sureste» del territorio alavés. Explican que la citada autorización tiene una vigencia de noventa años, pero precisan que debe ser prorrogada cada tres décadas. El primer plazo parcial se cumplió el año pasado, por lo que ahora han solicitado una renovación para otro de similar duración.

Impacto ambiental

La prórroga de permiso minero, sin embargo, en el caso de que se la conceda el Gobierno vasco, no es suficiente para que Echasa pueda continuar su labor. Necesita resolver la citada ampliación de su área de explotación, pues el sólo hecho de tener la concesión no le da derecho para ocupar los terrenos. En este segundo flanco de actuación es imprescindible que los ayuntamientos de Maeztu y Bernedo cambien la calificación urbanística de los suelos afectados por su ampliación.

Desde hace tres años las consistorios no pueden realizar esa recalificación hasta que la Diputación no emita un informe de impacto ambiental. Un documento en el que ya trabaja la dirección foral de Medio Ambiente.