La Guardia Civil multa en Castro a un comisario de la Ertzaintza de baja y en coche oficial

El incidente se produjo hace dos semanas. El 'nagusi' circulaba en el coche oficial con su pareja. La patrulla de Tráfico de Laredo les pidió la documentación en una de las entradas del municipio y comprobaron que el mando policial no está empadronado en Castro. El comisario explicó que vive en la localidad cántabra, aunque en su carnet de identidad figure un municipio vasco como lugar de residencia.

Según las fuentes consultadas, en ese momento se produjo una cierta discusión entre el ertzaina y los guardias civiles. Los agentes de la unidad de Tráfico argumentaron que los residentes en un pueblo tienen la obligación de estar empadronados allí. Y, además, le recordaron que, en ese momento del estado de alarma, no estaban permitidos los desplazamientos entre provincias si no era para acudir a su domicilio o por motivos excepcionales, como atender a un enfermo o para ir a trabajar. El 'nagusi', según los mismos medios, aseguró a los guardias civiles que estaban cometiendo un error y que la legalidad le amparaba. En todo caso, acabó sancionado por saltarse el confinamiento.

Se da la circunstancia de que el jefe circulaba en un coche oficial estando de baja. El Gobierno vasco pone vehículos a disposición de los mandos policiales de alto rango (subcomisarios, comisarios e intendentes) para sus desplazamientos laborales y para que puedan ir y volver de casa al trabajo. En principio, se trata de una forma de compensar la permanente disponibilidad de los miembros de la jefatura. Hasta hace un par de años, los jefes podían elegir entre disponer de un coche oficial o que les pagasen gastos de kilometraje.

Sin embargo, el departamento acabó eliminando este tipo de dietas para los mandos -y dejó como única opción el uso de coches-, después de que una investigación judicial, que terminó archivada, detectara numerosas irregularidades en los cobros de estas indemnizaciones por razón del servicio. En este contexto, según fuentes de la Ertzaintza, los funcionarios no están autorizados a disponer de estos vehículos si están de baja laboral.

La multa al 'nagusi' se suma a otras muchas sanciones impuestas durante el estado de alarma en el entorno de Castro a vascos que no están empadronados allí. La más llamativa ha sido la de Jon Sánchez, el director de Emergencias de Osakidetza que dimitió hace diez días al hacerse público que semanas antes había sido sancionado por saltarse el confinamiento. El portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, aseguró entonces que Sánchez no había dado una «imagen de ejemplaridad». La Guardia Civil también ha controlado las colas de los supermercados de Castro para sancionar a los no censados en la localidad cántabra.