La oposición, a la espera de las explicaciones de Murga en la Cámara

EH Bildu arremetió con dureza contra la titular de Salud. En boca de la parlamentaria Rebeka Ubera, la formación soberanista calificó de «escándalo de primera magnitud» que la actual consejera pudiera asumir «con naturalidad la filtración». «Ni el lehendakari ni la propia consejera pueden hacer como que aquí no ha pasado nada tras hacerse público que estaba al tanto de las filtraciones y las asumía con naturalidad como una parte más del sistema. Después de esto, la titular de Salud carece de cualquier credibilidad para dirigir la investigación de la OPE y aclarar las irregularidades cometidas», subrayó Rebeka Ubera.

«Esto demuestra que el 'vox populi' de las OPE 'dopadas' es una realidad en Osakidetza, de la que hasta la propia consejera pudo ser conocedora», manifestó a su vez la representante de Elkarrekin Podemos Cristina Macazaga. La parlamentaria avanzó que el grupo al que representa está a la espera de escuchar todas las explicaciones que tenga que dar Murga en relación a su vinculación con las filtraciones y saber si era «conocedora de prácticas corruptas» para, después, «obrar en consecuencia».

En opinión del PP, los hechos son «suficientemente graves como para que la consejera dé explicaciones inmediatas y no espere hasta el viernes» cuando se celebre el pleno de control al Gobierno. La popular Laura Garrido avanzó que su formación valora «pedir la comparecencia de Murga» específicamente en el seno de una comisión de Salud en sede parlamentaria. «Las explicaciones le corresponde darlas a la consejera. Queremos saber si son ciertas o no esas afirmaciones y si conocía la existencia de las filtraciones en aquel momento», recalcó Garrido.

Desde el PSE -socio de gobierno del PNV- se mostraron prudentes y esperarán al viernes a «escuchar a todas las partes y las explicaciones de la consejera antes de fijar una posición».

Para LAB, uno de los dos sindicatos junto a ESK personados en la causa, la documentación que integra el sumario judicial permite determinar que «las filtraciones en los exámenes de categorías médicas especialistas constituían una práctica habitual, conocida por todo el mundo y también por cargos directivos de Osakidetza y de la consejería». Y avanzaron que aparecerán más comentarios como el que supuestamente realizó Murga «dado el nivel de conocimiento que existe sobre estas prácticas corruptas». ESK lamentó por su parte que se «coloque en los puestos de mando a personas que conocen y avalan un sistema clientelar para asignar las plazas fijas».