Bilbao suma a su red el centro de salud de Irala para más de 12.600 vecinos

La capital vizcaína ha incorporado en Irala un nuevo equipamiento a su red de Atención Primaria pública. La construcción de un centro de salud en esta zona llevaba años en la agenda de las instituciones. De hecho, ya fue negociado por Iñaki Azkuna y el consejero Rafael Bengoa. Los vecinos lo pedían hace tres lustros, ya que debían desplazarse hasta los de Bombero Etxaniz y Rekalde para satisfacer sus necesidades de asistencia médica. La oposición lo demandaba al asegurar que los recintos sanitarios de la ciudad estaban al límite. Al final, un acuerdo entre el Consistorio y el Departamento de Salud en 2019 consiguió darle impulso.

El Ayuntamiento cedió a Osakidetza parte del edificio de la antigua fábrica Harino Panadera, protegido y rehabilitado por las arcas locales. Era el emplazamiento deseado por su importancia histórica para el barrio y sus dimensiones. En el resto del inmueble siguen los laboratorios del área de Salud y Consumo y el patrimonio museístico de la fábrica.

El lehendakari, Iñigo Urkullu, el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, junto a la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, y la directora general de Osakidetza, Rosa Pérez, inauguraron este martes el centro de salud. Cuenta con planta baja y otras tres alturas, que suman en total 1.226 metros cuadrados. Su adaptación requirió 2,3 millones de euros de inversión, para dar servicio de medicina general a más de 12.600 vecinos del barrio.

Nueve facultativos de medicina de familia, nueve profesionales de enfermería, una matrona, un técnico de cuidados auxiliares de enfermería, cinco administrativos y dos celadores trabajarán en el recinto de ocho de la mañana a cinco de la tarde, de lunes a viernes. La atención pediátrica se prestará en el centro de Bombero Etxaniz, a unos diez minutos a pie, que abre hasta las 20.00 horas. Ambos conformarán una única Unidad de Atención Primaria, que pasará a denominarse UAP Bombero-Irala. Es decir, dependerán de un mismo organigrama.

La entrada en funcionamiento del nuevo centro de salud permitirá descargar de parte de actividad otros emplazamientos sanitarios. Además, en Irala cabrían ampliaciones de servicio, ya que se han diseñado más consultas de las que se utilizarán por ahora. Urkullu explicó que anualmente se cubrirán de media 33.340 consultas de medicina general, 14.088 de enfermería, 10.413 procedimientos de enfermería y 10.279 extracciones.

El equipamiento se sumará a los otros 25 ambulatorios y centros de salud repartidos por Bilbao. Cuatro también funcionan como puntos de atención continuada (Begoña, Deusto, Rekalde e Indautxu), que en su mayoría abren hasta la medianoche y de 09.00 a 00.00 horas durante los fines de semana y festivos para atender urgencias leves. El último que se estrenó en la villa fue el de Miribilla, que abrió sus puertas a principios de 2016, también en un espacio del organismo Viviendas Municipales.

El lehendakari apuntó que el nuevo centro de Irala, «moderno, accesible y construido con criterios de eficiencia energética», pone en valor «la capacidad organizativa y de gestión» de la Administración vasca. «Incluso en plena pandemia, seguimos cumpliendo las necesidades del presente y anticipándonos a las del futuro», dijo, antes de agradecer la colaboración del Ayuntamiento bilbaíno. «Se mejora la asistencia sanitaria a los vecinos, a la vez que se reafirma el compromiso de seguir reforzando la Atención Primaria, apostando por la salud integral de las personas», abundó. «Cada nueva infraestructura sanitaria supone un nuevo paso hacia nuestro objetivo de acercar cada vez más los servicios de salud a cada barrio -precisó-. Garantizar la equidad en el acceso de todos los ciudadanos al sistema sanitario público es una prioridad para el Gobierno vasco».