El PP evita la reprobación parlamentaria del Departamento de Salud por la OPE

Los populares, aunque críticos con el Servicio de Salud, se han distanciado desde la dimisión del exconsejero Jon Darpón de los otros dos grupos de la oposición en su estrategia para presionar al Gobierno. Ayer decidieron presentar su propia enmienda a la totalidad en la que solicitaban a Salud una «actitud de colaboración absoluta con la Justicia», además de cuestionar el papel del IVAP y del Departamento de Gobernanza Pública y Autogobierno. Tampoco salió adelante.

Lo que quedó de manifiesto ayer es que el escándalo de la OPE y la gestión que ha hecho del mismo el Ejecutivo de Urkullu es un tema sobre el que los partidos de la oposición van a seguir incidiendo mientras consideren que hay motivo para ello. Y a día de hoy lo siguen pensándo. La soberanista Rebeka Ubera criticó al Departamento por «no paralizar las convocatorias de las categorías médicas bajo sospecha en la última convocatoria y no entregar toda la documentación a los tribunales, algo que demuestra la prepotencia de este Gobierno». «En Osakidetza tenemos un cáncer, que es esta OPE, y no tenemos médico que se atreva a tratarla», sentenció.

Cristina Macazaga, de Elkarrekin Podemos, reprochó con dureza la gestión interna de la crisis realizara por Salud. «En los expedientes de la investigación se desvelaron actuaciones irregulares, cercanas a la mafia, pero se optó por no actuar ni trasladarlo a la Fiscalía. Eligieron taparlo».

Desde las filas del PP Laura Garrido dio una de cal y otra de arena al Ejecutivo. Por un lado reconoció la notable aceptación de culpas, que desembocó en tres dimisiones -la del exonsejero Jon Darpón, la de la exdirectora de Osakidetza, María Jesús Múgica, y la del exdirector de Recursos Humanos, Juan Carlos Soto-. «Nunca ha habido precedentes en el Gobierno de una asunción tan grande de responsabilidades, lo que evidencia la dimensión del escándalo», reconoció. Por otro, coincidió con Ubera al afirmar que desde Osakidetza «no se ha remitido toda la información sobre la OPE a la Fiscalía».

La moción conjunta de Bildu y Podemos que no salió adelante también pedía la apertura de un expediente informativo a Belén Greaves, exdirigente jeltzale a la que se le encargó la investigación interna en la categoría de cardiología para «analizar su actuación».

El PNV, en palabras de Kerman Orbegozo, garantizó que Osakidetza ha remitido ya la totalidad de la documentación sobre la investigación interna a la justicia tras los dos requerimientos realizados por la magistrada en enero y marzo. Y repitió una frase de la consejera semanas atrás. «No negamos que hayan podido haber filtraciones de exámenes en las OPE». Aunque Orbegozo le añadió un matiz: «Lo que no tenemos son pruebas para determinar si existieron o no».