El importante aviso de Mario Picazo sobre las botellas de vidrio

«¿Es posible que las botellas de vidrio contengan más microplásticos que las de plástico?». Así comienza su último post en X (antes Twitter) Mario Picazo, que se hace eco de una investigación de la agencia francesa de seguridad alimentaria (ANSES), la cual ha revelado que las botellas de vidrio contienen una cantidad significativamente mayor de microplásticos en comparación con las botellas de plástico o las latas metálicas.

El conocido meteorólogo ha considerado muy interesante este hallazgo, publicado en la revista Science Direct, por la gran cantidad de botellas de vidrio que se utilizan en la vida cotidiana: en bebidas como el agua, refrescos, cerveza, vino... «Los investigadores han detectado estas diminutas partículas de plástico, en su mayoría invisibles, en todo el mundo, desde el aire que respiramos hasta los alimentos que comemos, así como en el cuerpo humano», comenta.

El objetivo del estudio, que fue difundido de forma pública el pasado viernes, era analizar la cantidad de microplásticos presentes en diferentes tipos de bebidas comercializadas en Francia y examinar el impacto del tipo de envase en esta contaminación.

Los investigadores encontraron una media de alrededor de 100 partículas de microplástico por litro en botellas de vidrio de refrescos, limonada, té helado y cerveza. Esa cifra era entre cinco y cincuenta veces superior a la detectada en botellas de plástico o latas de metal. Sin embargo, señala Picazo, «aún no hay pruebas directas de que esta preponderancia del plástico sea perjudicial para la salud humana, pero un campo de investigación en auge tiene como objetivo medir su propagación».

En el caso del agua, tanto sin gas como con gas, la cantidad de microplásticos era relativamente baja en todos los casos, oscilando entre 4,5 partículas por litro en botellas de vidrio y 1,6 partículas en botellas de plástico. El vino también contenía pocos microplásticos, incluso las botellas de vidrio con tapón.

Sin embargo, los refrescos contenían alrededor de 30 microplásticos por litro, la limonada 40 y la cerveza alrededor de 60. «Dado que no existe un nivel de referencia para una cantidad potencialmente tóxica de microplásticos, no fue posible determinar si estas cifras representan un riesgo para la salud, según la ANSES. Sin embargo, los fabricantes de bebidas podrían reducir fácilmente la cantidad de microplásticos que desprenden los tapones de las botellas», destaca el meteorólogo.

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