El Gobierno vasco reserva 17,5 millones para comprar 125 pisos y destinarlos al alquiler social

Se trata de una de las principales acciones que contempla un Presupuesto que busca dar respuesta a la problemática residencial a través de «mecanismos transformadores» y «acelerando el ritmo de construcción» de cara al 2025, sobre todo en materia de alquileres. De los 446 millones de euros que conforman las cuentas del Departamento, 286 están destinados exclusivamente al programa de Vivienda (+36%). «Abogamos por una política afectiva y sensible para demostrar que este tensionamiento que vivimos tiene solución», ha apelado el consejero en su comparecencia.

Los esfuerzos se centrarán sobre todo en reforzar las políticas de arrendamiento social. El compromiso anunciado por el Departamento es sacar al mercado 7.000 nuevos alquileres en cuatro años, la mitad para jóvenes. Una cifra que en palabras del consejero «podría incluso superarse» gracias a la inyección presupuestaria prevista. La inversión destinada a impulsar los alquileres alcanza los 248,5 millones de euros, el 68% del gasto del programa.

Además de la compraventa de pisos privados, el consejero ha explicado que el próximo año se iniciarán 1.475 viviendas y alojamientos dotacionales destinados al alquiler: 225 serán promovidas por el propio Departamento, 750 por Visesa, la cual aumentará su ritmo de producción en un 50%, y el resto por constructoras privadas con subvenciones públicas. «La finalidad es mantener el ritmo para alcanzar los 6.400 pisos en el transcurso de la legislatura que, sumadas al reto de captar 850 residencias a través de Bizigune, podrían permitirnos rebasar nuestros objetivos de mandato», ha asegurado Itxaso. La consejería también prevé gestionar otros 400 hogares a través del programa Asap.

Además de alquileres, también se construirán pisos en propiedad. El Gobierno vasco estima que la iniciativa privada pondrá en marcha otros 1.200 pisos protegidos en propiedad o alquileres con opción a compra. Al mismo tiempo el proyecto de Presupuesto recoge una partida de 20,6 millones de euros para adquirir suelos para 1.500 nuevos alquileres; se inyectarán 34,3 millones de euros para la compra de promociones de Alokabide a Visesa y se espera ingresar otros 20 millones por la venta de suelos de VPO descalificadas en derecho de superficie.

Si promover más alquileres sociales es un eje estratégico del Presupuesto, rehabilitar el parque residencial para «dar respuesta a las necesidades habitacionales» es otro. 159,8 millones de euros del gasto imputable están directamente asignados a las políticas de rehabilitación. Sólo las subvenciones en materia de reformas crecen hasta los 41,2 millones, un 17,1% más de lo acordado para este ejercicio. En este sentido, el consejero ha reiterado la importancia de hacer una «intervención integral» de un parque con más de 90.000 edificios construidos antes de 1960. Los proyectos que contempla el Presupuesto en este área son: impulsar la reforma de 3.800 edificios, mejorar la accesibilidad de 4.000 viviendas con la instalación de medio millar de ascensores y crear 1.000 pisos a través de segregaciones.

Por otro lado, el Gobierno vasco busca extender el Derecho Subjetivo a la Vivienda a 35.000 familias y aumentar la Prestación Económica a la Vivienda en 11.000 unidades convivenciales. La partida correspondiente se nutre de 30 millones de euros frente a los 24,8 que tenía este año.

También se inyectará más dinero en el programa Gaztelagun, un subsidio que apoya económicamente a los menores de 36 años en su proceso de emancipación con un respaldo 300 euros al mes. Esta ayuda elevará su dotación económica en un 47% hasta los 25 millones de euros, lo que permitirá aumentar los umbrales de acceso que marca el programa hasta los 30.000 euros. El reto es pasar de 7.000 beneficiarios a 8.500.

Asimismo, el Departamento pondrá en marcha una línea de avales para compra y alquilar, que operarán de forma «combinada» con los que ofrece el ICO.

Pese a que el Presupuesto cuenta con mayoría parlamentaria (PNV y PSE) para ser aprobado en el pleno de diciembre, el consejero ha pedido a los grupos de la oposición su «mejor disposición» para respaldarlo. Durante la comparecencia del consejero la parlamentaria del PP, Ana Morales, ha matizado que el número de viviendas estimado «no es suficiente» para satisfacer la demanda actual, que ya supera las 98.800 personas. «Es cierto que tiene interés en subir los niveles de producción, pero 7.000 alquileres no llegan a satisfacer ni el 12% de los solicitantes. Hay que hacer políticas de mayor alcance», ha señalado.

Mientras que PNV y PSE han alabado que el Pais Vasco sea la comunidad con «mejor política de vivienda pública», EH Bildu ha criticado que el Presupuesto «no vaya a poner una solución a futuro» a esta preocupación. «La movilización de vivienda no es suficiente y no se potencian alternativas residenciales como el cohousing o la vivienda colaborativa», ha afirmado el parlamentario Xabier Luque Astigarraga.