Expertos señalan el sistema educativo vasco como uno de los más desiguales de España
Euskadi es la segunda comunidad donde más influye el nivel socioeconómico en las notas de los alumnos
Los resultados de los alumnos vascos en la última edición del informe PISA, el estudio educativo más prestigioso a nivel internacional conocido hace una semana, ... son malos por partida doble. Por un lado, porque son los peores desde que Euskadi participa en el informe y, además, reflejan grandes retrocesos en la última década. Y, por otro, porque dejan al descubierto una enorme brecha entre los estudiantes locales y los más vulnerables, sobre todo los de origen extranjero.
Este segundo factor es el que ha llevado al 'think tank' educativo EsadeEcPol y a Save The Children a señalar al País Vasco como una de las comunidades autónomas menos equitativas; es decir, una de las más desiguales. Para llegar a esta conclusión, Lucía Cobreros y Lucas Gortazar, coautores del informe 'Equidad educativa: diagnóstico PISA 2022' han tomado como referencia los resultados en Matemáticas (Euskadi, con 482 puntos, se situó justo por delante de la media española).
Un análisis de los microdatos de PISA revela que, en Euskadi, el 17,8% de la nota de Matemáticas se puede explicar por el nivel socioeconómico del alumno. En otras palabras, Euskadi es la segunda comunidad donde los colegios tienen menos influencia a la hora de corregir las desigualdades socioeconómicas de base con las que llegan los alumnos. Es la segunda comunidad con el dato más alto empatado con Murcia y sólo por detrás de Asturias. Pero el dato vasco es el que más ha aumentado en los últimos cuatro años.
«La segregación va más allá del sistema educativo, también tiene que ver con el lugar de residencia»
Brecha chicos-chicas
Y esto es especialmente grave en el caso de los estudiantes de origen migrante, que copan los escalones más bajos en cuanto a renta familiar. Así, los alumnos foráneos obtuvieron 70 puntos menos que sus compañeros en Matemáticas, lo que equivale a casi dos cursos de distancia. Si se descuentan los factores socioeconómicos, la brecha se reduce a la mitad pero sigue siendo abismal, la más alta de España. Se trata de «un problema que va más allá del sistema educativo, y está muy relacionado con la segregación residencial», apunta Cobreros.
Por contra, la brecha en Euskadi entre chicos y chicas es la segunda menor de toda España; en el otro extremo se sitúa Cantabria. Y la distancia en el rendimiento académico entre quienes cursan sus estudios en colegios ubicados en las ciudades y los estudiantes del entorno rural es la más baja del país. Castilla y León, en cambio, es la comunidad donde esta brecha es mayor. Los alumnos vascos, además, son los segundos que menos probabilidades tienen de repetir curso.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
