El Defensor del Pueblo identificó abusos en 54 parroquias y colegios vascos

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El equipo liderado por Ángel Gabilondo, del que forman parte cinco expertos vascos en ámbitos como el derecho, la criminología, la teología y la psicoterapia, no concreta el número de agredidos o de autores de los abusos, solo de los espacios físicos en los que se cometieron las atrocidades. Ese listado, insistían en el propio anexo que recopila los casos, «no implica necesariamente un solo agresor y una sola víctima» en cada localización.

«Hay centros educativos (colegios, seminarios) que incluyen casos de varios agresores y con varias víctimas en el mismo o diferente periodo de tiempo; parroquias con un agresor y numerosas víctimas...», puntualizaban. Es lo que sucedía, por ejemplo, con el Colegio Resurrección María de Azkue y el Seminario de Derio. Aparece en una sola ocasión, en el mismo epígrafe, porque el centro educativo se emplazó en las instalaciones de la institución de formación para el sacerdocio. En una investigación encargada por el Obispado de Bilbao a la Universidad de Deusto, se contabilizaron al menos tres sacerdotes que abusaron de seminaristas.

«De igual modo, aunque sea excepcional, un agresor puede haber generado distintas localizaciones al actuar en sitios diferentes con víctimas sucesivas», matizaban. Esta situación sí se daba con algunos religiosos, vinculados a abusos en diferentes colegios de una misma orden, y con algunos sacerdotes, como un cura al que se le acusa de pederastia tanto en Erandio como en el barrio bilbaíno de San Ignacio.

En junio, la Iglesia admitió 971 víctimas y 728 abusadores en todo el país.