Podemos vuelve a pactar con Urkullu y apoyará la Ley vasca de Memoria Histórica
El acuerdo incorpora el reconocimiento explícito de víctimas, la creación de un censo con todas ellas y una reparación económica
La Ley de Memoria Histórica y Democrática de Euskadi, uno de los proyectos estrella de la tercera legislatura de Iñigo Urkullu, saldrá adelante en las ... próximas semanas no sólo con los votos de PNV y PSE-EE, sino también con los de Elkarrekin Podemos-IU. La coalición morada apoyará la norma en el Parlamento vasco tras lograr un acuerdo por el que incorpora novedades al texto como el reconocimiento explícito de las víctimas, la creación de un censo con todas ellas, una reparación de carácter económico y una mejora en el banco de ADN.
Pese a que los partidos que sustentan el Gobierno vasco ya disponen de por sí de una plácida mayoría absoluta (41 de 75 parlamentarios) para ratificar todas sus iniciativas, la mayoría de las leyes de este mandato están siendo aprobadas con la participación de algún grupo de la oposición. Elkarrekin Podemos-IU ya había acordado anteriormente otras normas como la 'ley antipandemia', Juventud, Igualdad y RGI, al igual que EH Bildu lo hizo, por ejemplo, con los Presupuestos de 2022 y PP+Cs, con la Ley de Empleo Público.
La portavoz morada, Miren Gorrotxategi, ha querido subrayar este miércoles el esfuerzo de su grupo por «ejercer una oposición firme pero también responsable», aunque en todo momento ha negado que ello suponga convertirse en el «socio preferente» del Ejecutivo autonómico. En este caso, el acuerdo afecta a una cuestión que tanto Podemos como Ezker Anitza sitúan entre sus prioridades porque «avanza hacia la construcción de una memoria histórica más justa y mejor» en una tierra como Euskadi, «tan marcada por la lucha por la libertad y los derechos».
La coalición de izquierdas partía de la premisa de que la tramitación parlamentaria debía «modificar sustancialmente sí o sí» el proyecto que el Consejo de Gobierno presentó en julio de 2021. Un texto que, en palabras de la consejera Beatriz Artolazabal, buscaba «por un lado, promover la memoria, el reconocimiento y la reparación de las víctimas de la Guerra Civil y la Dictadura franquista; y por otro, fomentar principios y valores éticos y democráticos». El proceso se retrasó durante meses por un «error humano» por el que se envió un borrador antiguo a la Cámara.
Tras semanas de negociaciones, el parlamentario Jon Hernández ha revelado que «la mayor parte de nuestras 60 enmiendas acabará formando parte del texto». Entre las aportaciones de la coalición morada, destaca la «reparación integral», no sólo moral sino también económica, de las víctimas, que además tendrán esa categoría. La norma también incorpora la principal demanda de Elkarrekin Podemos-IU, la de incluir un censo de víctimas del levantamiento militar y la posterior dictadura franquista, tanto de fallecidos como de supervivientes.
Desde la entrada en vigor de la ley, el Gobierno vasco tendrá la obligación de reservar una dotación presupuestaria para su cumplimiento y también deberá realizar un plan plurianual sobre la búsqueda de víctimas. Se constituirá, asimismo, un equipo de investigación científico que elaborará un informe de vulneraciones de derechos humanos y también se realizará un archivo de testimonios. De igual forma, se mejorará el banco de la ADN con la recogida gratuita de muestras y se endurecerá el régimen sancionador para quienes destruyan o dañen espacios memorialistas.
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