Un error del Gobierno vasco deja en el aire la tramitación de la Ley de Memoria Histórica
Envió al Parlamento un borrador antiguo en lugar del proyecto final, una «chapuza» denunciada por el PP y que retrasará su aprobación definitiva
Ni los más veteranos recuerdan algo parecido, síntoma de la incertidumbre a la que se enfrenta este caso. Durante los últimos cuatro meses, el Parlamento ... vasco ha tramitado el proyecto de ley de Memoria Histórica y Democrática de Euskadi, una de las iniciativas estrella del Gobierno de Iñigo Urkullu. Decenas de comparecencias de expertos, centenares de folios de documentación y un plazo de enmiendas aún abierto para que los grupos hagan sus aportaciones a una norma que se pretende aprobar en los próximos meses. Sin embargo, ahora todo está en el aire. Resulta que el texto remitido por el Ejecutivo, el origen de todo el procedimiento, no era el correcto.
Un «error humano», según explican fuentes gubernamentales a EL CORREO, ha sido el causante del enredo. El personal de la Secretaría del Consejo de Gobierno envió a la Cámara autonómica un antiguo anteproyecto de la norma en lugar del documento definitivo que la consejera Beatriz Artolazabal presentó el 27 de julio de 2021 en la reunión semanal del Gabinete. De hecho, el texto que llegó a manos de los grupos parlamentarios el pasado 15 de septiembre mantiene la firma digital del lehendakari, Iñigo Urkullu, fechada el 13 de febrero de 2020, año y medio antes de lo que correspondería a la verdadera iniciativa.
Las dos versiones se contradicen en el periodo de aplicación, el régimen de ayudas e incluso en el número de artículos
El borrador y la versión definitiva difieren en casi una decena de preceptos. Ni siquiera tienen el mismo número de artículos: 45 frente a 44. Lo que ocurrió entre medias es que la Comisión Jurídica Asesora (COJUAE) emitió su informe preceptivo con recomendaciones para pulir la norma. También el Instituto de la Memoria, Gogora, aportó una memoria final. En base a sendos documentos, fechados en julio de 2021, se incluyeron algunos cambios. Por ejemplo, se limitó el periodo que abarca la ley hasta la aprobación de la Constitución en lugar del Estatuto de Gernika y se suprimió la retirada de ayudas y subvenciones públicas a quienes incumplieran la norma.
Posibles escenarios
La Comisión de Derechos Humanos, Igualdad y Justicia arrancó el procedimiento a comienzos de otoño sin percatarse del error. Y no ha sido hasta ahora cuando el grupo PP+Cs lo ha detectado. Su portavoz, Carmelo Barrio, denuncia «una auténtica chapuza» por parte del Ejecutivo autonómico porque la equivocación «ha condicionado toda la tramitación». Por el momento, ha solicitado la comparecencia de la consejera Olatz Garamendi, en su calidad de secretaria del Consejo de Gobierno, para que dé explicaciones. Pero el parlamentario popular considera que la única vía posible es «retirar el proyecto y volverlo a presentar».
El Gabinete Urkullu, por el contrario, considera que el error es subsanable sin tener que resetear el procedimiento. Presentará un oficio ante el Parlamento con el documento correcto y espera que la Mesa, controlada por PNV y PSE-EE, devuelva el proceso al momento en el que se abrió el plazo de enmiendas, de forma que los grupos tengan margen para adecuar sus correcciones. Ese paso se dio a finales de noviembre, por lo que, habida cuenta de que enero es inhábil, calculan que el retraso en la aprobación en pleno sería de «un mes».
Pero en la Cámara, por ahora, no tienen claros los pasos a seguir ante una situación inédita. Los servicios jurídicos aguardan a recibir el oficio por parte del Gobierno vasco para leer los términos exactos y saber qué procedimiento concreto pretende activar para corregir el error. Ningún escenario está descartado. Lo único seguro es que la ratificación de la norma deberá esperar más.
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