El Gobierno transferirá a Euskadi la gestión económica de la Seguridad Social en diciembre de 2021

Josu Erkoreka y la ministra Carolina Darias han escenificado hoy en Vitoria el «inicio de una nueva etapa» que permitirá el cumplimiento del actual Estatuto de Gernika a corto plazo. El consejero y la titular de Función Pública han comparecido para explicar los detalles de un calendario de transferencias que cuenta con varias novedades: el adelanto del traspaso de Prisiones sobre el calendario previsto y, sobre todo, la inclusión de la gestión del régimen de la Seguridad Social, una materia que hasta la fecha el Gobierno central se negaba a incluir en cualquier documento sobre competencias. Con un nuevo escenario político en Madrid, el guión ha cambiado. Las dos administraciones se han comprometido a iniciar una negociación en junio del año que viene para que a partir de diciembre pudiese pasar ya a manos vascas, aunque dadas las múltiples aristas de la negociación es más que probable que llegue más tarde. La de Prisiones está previsto que sea transferida a finales de este mismo año.

La voluntad de ambas partes por completar el Estatuto no es nueva. De hecho, a finales de 2018 el propio Erkoreka y la entonces ministra Meritxell Batet ya firmaron un primer calendario. Aquel documento prácticamente no se materializó debido a que Sánchez convocó elecciones y el Gobierno central ha estado en funciones ocho meses. Con un nuevo Ejecutivo y Darias en lugar de Batet, las negociaciones se han retomado y han permitido en apenas un mes hacer un nuevo cronograma.

Tres son los principales cambios sobre la hoja de ruta de hace dos años. El primero, que a mediados de marzo habrá nuevas transferencias. La última en llegar al País Vasco fue la AP-68 justo antes de los comicios de abril. El próximo 16 de marzo se reunirá la Comisión Mixta de Transferencias para hacer oficial tres nuevas materias: seguro escolar, productos farmacéuticos y las ayudas a los trabajadores afectados por los ERE. Aunque son de carácter menor, servirán para subrayar la voluntad del Gobierno central por completar el Estatuto. Además, llegarán en una fecha muy concreta. A cuatro días para que arranque la campaña electoral, lo que permitirá tanto al PNV como al PSE 'venderlo' como un logro político en plena carrera hacia las urnas.

Pero como ha reconocido la propia Darias, el foco «mediático» está puesto en otro lugar: en Prisiones y en el régimen económico de la Seguridad Social. En especial, en esta segunda materia, cargada de una profunda carga política. Su simple inclusión en un documento en el que el Gobierno central asume su traspaso ha sido considerado por Erkoreka como una victoria. Se trata de una cuestión que para el Ejecutivo de Sánchez es materia peligrosa, ya que otorga a la oposición munición para acusar al PSOE de que quiere romper la 'caja única' y de que está cediendo a las pretensiones de los nacionalistas. De hecho, tanto el PP, como Vox y Ciudadanos han cargado de inmediato contra los socialistas.

Según el calendario presentado esta mañana, «los estudios para el examen de materias relacionadas con la gestión económica de la Seguridad Social» se iniciarán en junio de 2021 y finalizarán en diciembre de ese mismo año. ¿Será entonces cuando llegue la transferencia? La ministra se ha esforzado en recalcar que se trata de una cuestión «tremendamente compleja» y que se han elegido esas fechas para permitir que los acuerdos sobre el Pacto de Toledo estén «avanzados». Eso conllevaría que podría retrasarse incluso más. Darias y Erkoreka, en realidad, han evitado concretar cómo se realizará el traspaso y cómo afectará a los funcionarios del ministerio que trabajan en Euskadi. «Es un calendario realista y hay que ir paso a paso», ha recalcado la ministra.

En un intento por rebajar la polémica, Erkoreka ha destacado que «no se rompe la 'caja única'» y que el actual Estatuto «no permite una Seguridad Social propia e independiente». Fuentes socialistas, incluso, han rebajado un poco las expectativas al asegurar que la apertura de las negociaciones no significa que vayan a llevar a buen puerto.

El otro punto clave es el de Prisiones, también con una profunda carga simbólica. Llegará a finales de este mismo año, lo que supone un adelanto sobre el calendario previsto. La importancia de esta competencia radica en que su llegada a Euskadi siempre ha estado vinculada a la situación de los presos de ETA. Aunque la política penitenciaria seguirá en manos de Madrid, el Gobierno vasco sí tendría margen para flexibilizar las condenas, como está ocurriendo en Cataluña con los presos del 'procés'. Además, se trata de una competencia con una importante carga financiera, ya que las prisiones vascas, en especial, en Bizkaia y Gipuzkoa, requieren de importantes inversiones.