Surfistas rescatan a 30 bañistas en la playa de Sopela, aún sin socorristas

Monitores de las escuelas de surf y aficionados que practicaban ese deporte rescataron a «más de una treintena de chavales entre las dos y las seis de la tarde». De no ser por ellos, el mar podría haberse cobrado alguna vida. La tensión llegó a tal punto que las escuelas tuvieron que llamar a la Policía Local de Sopela, que a su vez solicitó refuerzos a la Ertzaintza, para que impidiesen el baño. Se vivieron situaciones de peligro, porque muchos se negaban a cumplir las recomendaciones y se lanzaban al agua.

Gorka Yarritu, que lleva más de 28 años instruyendo a futuros surfistas, reconocía a este periódico que «a veces la corriente se pone más intensa, pero es cierto que no ha habido muchas olas grandes, ha sido un día excepcional y curiosamente se ha formado un 'río' que se llevaba a la gente». Según su relato, entró y salió más de «cuatro o cinco veces» del agua y en cada ocasión sacaba a «dos bañistas». Su hijo y otro monitor de la escuela no dudaron tampoco en echarse a la mar. No es la primera vez que hacen un rescate.

Igual que los monitores del otro centro, Peña Atxuri, que está casi en la arena. Los que allí se encontraban no lo pensaron dos veces a la hora de coger la tabla. «Es cierto que no tenemos obligación, pero no podemos quedarnos impasibles. Se trata de vidas», reconocían los surfistas.

Naroa Saratxaga fue la primera en dar la voz de alarma. «Me pareció que había dos chavales ahogándose», recordó. Cogió los prismáticos y vio que la situación se repetía en otros puntos, así que no tardó en dar instrucciones a sus compañeros. «Unos han ido a sacar a dos, pero luego había otros cuatro más y otros cuatro. Ha sido un sin parar. Hasta que no ha venido la Policía no ha cambiado el panorama. Por suerte todos han salido bien, pero si no llega a ser por los monitores de la escuela, más de uno no lo cuenta», narraba. Ander Urquijo, Jontxu, Mikel, Alex, Eneko... Todo el que estaba allí se unió a participar en los rescates.

«En cinco minutos hemos sacado a más de seis personas, gracias a que recibimos cursillos de salvamento y rescate, pero es que había mucho cabezón que le decíamos que no entrase y nada, la chulería de ser chavalillos, de terminar el Bachillerato... les llevaba a no hacernos caso. Les decíamos que salieran porque en cuestión de segundos no iban hacer pie y nada, nos íbamos a rescatar a otros y teníamos que volver a por ellos. Estaban rojos y no podían nadar», explicaba Urquijo.

Todo el año

«Hoy todos han salido bien, por su propio pie, es cierto que apurados bastantes, pero hace quince días tuvo que venir una ambulancia porque dos chavalas salieron bastante mal, casi no lo cuentan y en el mismo sitio de la playa», detalló Saratxaga.

Considera que «en esta playa debería haber socorristas todo el año, porque, además, no hay educación». «La gente se mete donde no hay olas, y es al revés, se tienen que bañar ahí porque la ola te saca para fuera». La temporada de baño comienza oficialmente este domingo. «En mayo la gente tiene ganas. Desde Semana Santa vienen muchos», reconoce. «Esto de ayudar a los bañistas forma parte de lo que hacemos, pero hoy ha sido exagerado, hemos pedido a los monitores que no se fueran», afirmó.