Tarantino desenfunda
Un grupo de gente poco recomendable se da cita bajo la nieve en Wyoming para protagonizar 'Los odiosos ocho', un western fiel al ideario del cineasta
Borja Crespo
Miércoles, 13 de enero 2016, 20:31
Mal que les pese a algunos fans ahora convertidos en haters, Quentin Tarantino es uno de los pocos nombres citables si hablamos de cine ... de autor realizado dentro de la maquinaria de Hollywood. Es difícil mantener la personalidad en el negocio, ejemplos sobran últimamente, pero el artífice de clásicos como 'Reservoir Dogs' o 'Pulp Fiction' sigue fiel a sus obsesiones y no pierde su voz en un panorama audiovisual poco generoso con lo diferente. Con 'Los odiosos ocho' reafirma su amor por el western, un género que no deja de ofrecer buen cine: ahí está la sensacional 'Bone Tomahawk', vista en el último festival de Sitges, donde emocionó a los más cinéfilos. ¿Se estrenará en nuestras salas?
'Django desencadenado' no convenció a todos por igual, a pesar de su clara condición de homenaje y de seguir las pautas del cine de Tarantino, quizás porque las películas del Oeste de toda la vida, incluidas las de serie B, no son pasto de tantos gustos como se cree ni gozan de un público tan mayoritario como la comedia o el thriller. El mosqueo de algunos groupies no ha amedrentado a Tarantino en su empeño de ofrecer espectáculo a través de una corriente que define a un país.
Suena a Ennio
Con Ennio Morricone firmando la banda sonora, todo un tratado de principios, y un elenco de escándalo -Samuel L. Jackson, Kurt Russell, Jennifer Jason Leigh y Tim Roth, entre otros-, el francotirador Tarantino, un DJ de inusual talento visual, capaz de triturar referencias y crear su propia obra, ofrece con 'Los odiosos ocho' cine en estado puro, rodado en 70 milímetros, como en los gloriosos tiempos del séptimo arte. La historia se sitúa años después de la Guerra de Secesión. Una diligencia cruza el paisaje nevado de Wyoming. En su interior viajan un cazarrecompensas, John Ruth (Russell) y su presa, la fugitiva Daisy Domergue (Jason Leigh). Se dirigen a Red Rock y en su camino se encuentran con dos desconocidos: Chris Mannix (Walton Goggins), un renegado sureño que afirma ser el sheriff de la aldea, y el mayor Marquis Warren (Jackson), un antiguo soldado de la Unión.
Duración variable
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Es conocida la pasión de Quentin Tarantino por los clásicos del cine y por la manera de verlos en pantalla grande, como un ritual en la sala oscura, algo que, desgraciadamente, se está perdiendo. 'Los odiosos ocho' se estrena internacionalmente con una duración de 167 minutos. Sin embargo, la versión roadshow 70 mm., limitado a determinados teatros, cuenta con 187 minutos (incluyendo 3,48 minutos de obertura y 12 de intermedio). La nueva apuesta del otrora enfant terrible del cine norteamericano está rodada en Ultra Panavision 70. "Es perfecto para captar el inhóspito paisaje del Oeste, la nieve y la belleza de esos escenarios naturales", opina el cineasta. "Creo que estos grandes formatos ofrecen más intimidad, que puedes estar más cerca de los personajes".
Al microscopio
Cuatro personajes más irrumpirán en escena, convirtiendo el periplo en una inesperada aventura poco agradable. "'Los odiosos ocho' es un microscopio extraordinario de la condición humana, de las formas que tenemos de identificarnos y de movernos por la vida, de lo que las circunstancias extremas pueden hacer a la gente, y de la naturaleza cambiante de la lealtad y la traición", opina Stacey Sher, desde la producción. Todo envuelto en el envoltorio de un western invernal muy gracioso y divertido.
Jackson, actor fetiche de Tarantino, encarna a un tipo con mala reputación, uno de los ocho, a cual más impredecible y sibilino. "Tienes a ocho personas muy distintas, todas ellas muy peligrosas a su estilo, y cada una de ellas más o menos odiosa", explica el autor. "Va a ser un juego divertido para los espectadores, que cada cual preferirá a uno u otro personaje".
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