Servicios Sociales tiene reconocidas 1.916 prestaciones por dependencia en la ciudad
Las ayudas sociales se reparten entre las 1.337 personas registradas de acuerdo a su grado de dependencia
Toni Caballero
Martes, 10 de noviembre 2020, 23:06
La crisis económica provocada por la pandemia de la Covid-19 también va traer consecuencias a muchas familias, que verán reducida drásticamente su cantidad de ... recursos, así como a la concejalía de Servicios Sociales del Ayuntamiento mirandés, que a buen seguro verá aumentado sustancialmente el número de solicitudes de atención personal en la ciudad. En muchos casos, estas demandas van ligadas a una serie de servicios asistenciales cuyo coste económico resulta imposible de asumir por las unidades familiares, y para los que el acceso exige el reconocimiento de algún grado de dependencia.
En el caso de Miranda, a falta de dos meses para concluir el presente ejercicio, son 1.337 las personas que tienen reconocida algún tipo de prestación vinculada a la ley de dependencia, de las cuales 861 son mujeres y 476, hombres. Esto supone un ascenso de 24 personas dependientes respecto al registro 2019, en el que figuraban 1.313 personas recibiendo algún tipo de ayuda en este ámbito.
Este conjunto de ciudadanos y ciudadanas de Miranda dispone, actualmente, de un total de 1.916 prestaciones por dependencia, las cuales son otorgadas por el departamento municipal atendiendo al grado de dependencia que acredite cada usuario. «El número de prestaciones y el de personas dependientes no concuerda porque un usuario puede tener reconocida más de una prestación dependiendo del grado de dependencia que tenga y sus necesidades», explica el concejal de Servicios Sociales, Pablo Gómez.
Del total de prestaciones atribuidas por dependencia en Miranda, 757 están destinadas a dependencias de grado 1, 634 por un grado 2 y las 525 restantes, por grado 3 de dependencia. Por su parte, las 1.337 personas reconocidas como dependientes en la ciudad se dividen entre 538 de grado 1, 440 dependientes de grado 2 y 359 personas con el mayor grado de dependencia, el 3. En todos los apartados el porcentaje de mujeres es mayor que el de los hombres, en gran parte «porque las mujeres tienen una mayor esperanza de vida y esta dependencia suele acontecer en edades avanzadas».
El registro municipal de personas dependientes suma 24 nuevos nombres respecto a 2019, año en el que figuraban 1.313
En esta línea, la concejalía de Servicios Sociales ha tramitado 1.879 solicitudes para alguna prestación por dependencia en lo que va de año. De ellas, 1.187 fueron presentadas por mujeres y 692 por hombres. En relación al grado de dependencia reconocido por el Consistorio, 539 casos fueron admitidos entendiéndolos como una dependencia de grado 1, a 442 se les otorgó un grado 2 y 361 solicitudes lograron la prestación por grado 3 de gran dependencia.
Asimismo, 86 expedientes fueron cerrados al entender los trabajadores sociales que sus titulares no reunían los requisitos establecidos en la ley de dependencia, y otros 451 fueron catalogados como grado 0, «que, aunque se reconoce, no alcanza la puntuación necesaria para ser considerada como dependencia leve».
Servicios
Las prestaciones por dependencia reconocidas en la ciudad, 1.916 en total, abarcan desde diferentes servicios asistenciales como prestaciones económicas o complementarias. Así, hasta 125 prestaciones están relacionadas con el Servicio de Atención Residencial y 119 con centros de día o de noche. En otro sentido, también se destinan 466 prestaciones económicas vinculadas al servicio, «financiar la totalidad o parte de la cuota que supone ir al centro», y otras 259 ayudas están dirigidas a la teleasistencia para personas mayores que viven solas o a personas con diversidad funcional.
El computo de ayudas de Servicios Sociales también se compone de 387 prestaciones económicas para las unidades del entorno familiar y de 6 prestaciones económicas para la asistencia personal «un servicio que suele facilitarse a personas con un grado 2 o 3 de dependencia, que necesitan el apoyo indispensable y continuo de otra persona o tienen necesidades de apoyo generalizado», zanja Gómez.
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