La hostelería lamenta la problemática de las palomas

Mientras esto se hacer realidad lo cierto es que ya son varios los establecimientos hosteleros que aseguran que las palomas están suponiendo un problema significativo este año. «Es exagerado el número de ejemplares que hay. En nuestro caso hemos optado por poner un búho artificial disuasorio pero no funciona mucho la verdad. Las palomas siguen campando a sus anchas», aseguran desde el Café Saint Germain.

Recientemente, la Asociación Bonelli Burgos presentaba al Consistorio mirandés el Proyecto Brookei de refuerzo poblacional del halcón peregrino en la ciudad cuyo principal objetivo es favorecer y consolidar en el plazo de seis años el asentamiento y la nidificación del halcón peregrino (Falco peregrinus brookei) en Miranda, colocando para ello cajas nido en determinados edificios y en caso necesario utilizar la técnica del hacking para lograr dicho objetivo. «Sería un complemento esencial para el control poblacional de las palomas» aunque matizan que «aunque se logren los objetivos de asentar en la ciudad una o varias parejas de halcón peregrino, consiguiendo de esta manera contar con un predador natural de especies como la paloma bravía o doméstica, la tórtola turca y el estornino, no debemos caer en el error de pensar que estas especies vayan a disminuir drásticamente, sino que sus poblaciones se irán reduciendo lentamente al introducir un depredador natural hasta su convivencia en equilibrio», recalcan. Desde el Ayuntamiento de la ciudad aún no han informado de si este proyecto verá la luz finalmente aunque los máximos perjudicados esperan que así sea y que el control poblacional de palomas planteado pueda dar sus frutos. Recientemente, el Consistorio mirandés daba los resultados de la campaña de control de los dormideros urbanos de estorninos con la expulsión de 133.490 ejemplares de esta especie.