Tapia emplaza a las empresas a invertir sin esperar la llegada de los fondos europeos

La consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno Vasco, Arantxa Tapia, emplaza a las empresas a invertir en proyectos transformadores de futuro sin esperar a las ayudas europeas porque parece que se demoran y se desconoce las condiciones que se exigirán para su concesión.

En opinión de la consejera -que fue entrevistada en Radio Euskadi- «se están generando excesivas expectativas» respecto de los fondos europeos cuando «parece que se está retrasando esa llegada» y aún no se han definido desde la propia Europa «las condiciones» que habrá que cumplir para optar a su adjudicación, ni tampoco los preceptos para la devolución de esas ayudas.

Por eso recalcó que «lo más relevante es que empresas privadas y administraciones sepamos claramente qué proyectos queremos llevar adelante a partir del año 2021, porque son para hacer frente a la crisis causada por el la covid». Por lo tanto aboga porque «comencemos a implementarlos con nuestros propios recursos y si después somos capaces de captar recursos europeos, mejor que mejor». Así señala que «tenemos que ser conscientes de que tienen que ser proyectos transformadores y que se puedan llevar a cabo rápidamente».

Respecto a la profundidad de la crisis y la desaparición de miles de empresas, la consejera ha recordado los efectos tan negativos que tuvo la paralización total de la actividad que a finales de marzo decretó el Gobierno de Pedro Sánchez durante el estado de alarma. «Parece que no se quería entender que el cerrar la actividad en determinados momentos puede significar no poder volverla a abrir. Hay que ser consciente de esas circunstancias y hoy nos encontramos en esa consecuencia», remarcó.

La titular de la cartera industrial del Ejecutivo vasco reconoció que «aún nos queda un 2021 bastante difícil» para las empresas, por lo que recordó la batería de programas y ayudas públicas adoptadas para respaldarlas, como la línea de avales de Elkargi o la existencia del programa Bideratu para las empresas en crisis.

Por lo que se refiere al grupo Gestamp, la consejera rechaza romper relaciones o retirar ayudas públicas al grupo Gestamp, que tiene proyectos de inversión en Euskadi. Destacó el centro de excelencia para investigación en vehículo eléctrico -en que la compañía invertirá 17 millones y recibirá 8 millones en ayudas públicas- otro de fábrica inteligente, por el ajuste que va a acometer en la actividad de matricería y que supone el cierre de dos filiales -Matricería Deusto y GTS- y el despido de 230 trabajadores en el País Vasco.

La consejera especificó que se trata de dos situaciones paralelas, pero diferentes entre sí y que no se pueden mezclar. «Son dos elementos distintos» y desde su Departamento «seguimos trabajando con Gestamp para que lo que se está produciendo en matriceria tenga el menor efecto posible», al tiempo que están en contacto con la parte sindical.

Esta situación en matricería no es óbice para que desde el Ejecutivo se reconozca la importancia que tiene para la industria vasca que Gestamp haya decidido ubicar en Amorebieta los dos relevantes proyectos de futuro para automoción y que han logrado respaldo público. Así reiteró que para «atraer» a Euskadi ese centro de investigación sobre vehículo eléctrico y esa fábrica inteligente «hemos competido con otras regiones y países del mundo» y, por lo tanto «sigo defendiendo que eso es un elemento muy relevante, porque vamos a ser el lugar de referencia de Gestamp» en ambas tecnologías.