Los precios escalan dos décimas en Euskadi y la inflación en julio regresa al 3%
La vivienda, la energía y los servicios asociados a turismo y hostelería tensionan el dato, que vuelve a situarse en cifras de hace cinco meses
El verano, como suele ser habitual, ha tensionado los precios en Euskadi y el dato de la inflación registrado en julio ha recogido un aumento ... del IPC interanual de dos décimas, lo que supone escalar el 2,8% del pasado junio al 3%. Una barrera psicológica que se vuelve a rebasar cinco meses después y tras acumular tres incrementos consecutivos. Es el mayor periodo alcista en los últimos dos años, en los que la inflación había venido relajando su presión sobre el coste de la vida permitiendo al Banco Central Europeo (BCE) rebajar los tipos de interés al entorno del 2%.
Así se desprende de los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) referidos al mes pasado y que se han hecho públicos este miércoles. La factura de la luz y el gas han registrado una subida del 12% respecto al mismo periodo del pasado año liderando, así, el empujón junto al turismo y los servicios, que han presentado incrementos de precios en hoteles, cafés y restaurantes del 4%. En el caso de los establecimientos de alojamiento, el salto ha llegado al 7,1%. Datos que corroboran la fortaleza del consumo, los servicios y el turismo, que están tirando de la economía en el conjunto de España, pero también en Euskadi, aunque su peso sea menor.
La alimentación sigue mostrando un comportamiento más estable en los precios. En Euskadi, el aumento respecto al pasado año es de un 3%, muy lejano de las cotas de 2024 o 2023. Se nota el alivio de productos básicos como el aceite de oliva que avanza en su desescalada con una caída del 43% interanual.
Una subida de cuatro décimas en España hasta el 2,7%
El panorama hace que el País Vasco siga presentando una inflación superior a la de la media nacional, que dejó el índice interanual en el 2,7% aunque tras una subida de cuatro décimas, el doble que la de los precios vascos. El coste de la energía ha destacado también en el conjunto del país, a pesar de la bajada de los combustibles, por un doble efecto. Por un lado, el impacto de las medidas tras el apagón con un aumento del uso de gas en la generación de electricidad. Y, de otra parte, el 'efecto base' por la bajada de precios que registró este sector justo en el mes de julio del pasado año.
En lo que se refiere a la inflación subyacente, el índice que excluye la energía y los alimentos frescos del IPC, los datos corroboran también un tensionamiento de los precios. En julio subió una décima, hasta el 2,3%. Este dato, al descontar los elementos más volubles en la inflación, se considera más estructural y es el que los bancos centrales vigilan con más intensidad. En lo que llevamos de año ha mantenido un comportamiento más bien estable. En enero marcó el máximo con un 2,4%, que bajó al 2% en marzo. Y, tras un descenso en mayo, cuanta subidas de una décima por cada mes.
Por comunidades autónomas, Euskadi ocupa la quinta posición. La mayor subida de precios registrada en julio se ha dado en Baleares, más expuesta al turismo, que ha firmado un IPC del 3,5% interanual. Le sigue la Comunidad Valenciana, muy expuesta también a ese fenómeno, con un 3,2%, el mismo valor que Extremadura. Por encima del País Vasco también se sitúa Asturias, con un 3,1%.
Con las menores subidas de precios interanuales están Murcia (2%), Canarias (2,2%) y La Rioja, Galicia o Cataluña, las tres con un 2,3%.
Respiro respecto a junio
En cuanto a la evolución intermensual, entre junio y julio, se ha notado con fuerza el efecto de las rebajas y la estabilización de los costes en sectores clave como la alimentación o las gasolinas. Así, en Euskadi, los precios de junio a julio se aliviaron una décima. Los descuentos de los comercios han sido el principal apoyo de este comportamiento con un descenso del 10,3% en vestido y calzado. Los combustibles han permitido también avanzar en esa línea con un diésel que presenta descensos en el precio de un 2,8% interanual.
El abaratamiento de las gasolinas ha contenido el coste del transporte en el último mes con una subida de solo un 0,8% y ha favorecido que los alimentos entre junio y julio no solo se hayan apaciguado, sino que hayan bajado un 0,4%. En el último mes el sector que más ha subido los precios ha sido el ocio y la cultura, así como la restauración con un 1,7% solamente desde junio.
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